Socialismo o Barbarie, periódico Nº 146, 05/03/09
 

 

 

 

 

 

A 33 años del golpe militar

Del Cordobazo al Gran Acuerdo Nacional

Por Oscar Alba

El próximo 24 de marzo se cumplirán treinta y tres años del golpe militar que derrocó al gobierno de Isabel Perón y terminó con el proceso de ascenso obrero y popular que se había iniciado en el ‘69 con la irrupción del Cordobazo. Los desafíos y problemas políticos que enfrentan hoy las nuevas generaciones de trabajadores y estudiantes  producto de la crisis mundial y la política antiobrera de los Kirchner hacen necesario recrear y conocer las experiencias de lucha de aquel entonces, a pesar del tiempo transcurrido y el intento de convertir esta fecha en pura “efemérides”, las lecciones fundamentales de aquella época tienen plena actualidad. Con este fin vamos a presentar en tres notas el desarrollo de ese proceso de la lucha de clases en nuestro país.

En junio de 1966 las Fuerzas Armadas derrocaban al gobierno radical del doctor Humberto H. Illia e imponían en la Presidencia de la Nación al general Juan Carlos Onganía. El nuevo gobierno llevó adelante una política de mayor explotación de los trabajadores y un régimen autoritario. Entre otras medidas, Onganía paralizó la Comisión del Salario Mínimo Vital y Móvil. Levantó una legislación represora de los conflictos sindicales, intervino sindicatos y suspendió personerías gremiales. La gestión de Krieger Vassena al frente del Ministerio de Economía comprimió salarios y facilitó el paso de los monopolios internacionales. Onganía cerró el Parlamento, sancionó la Ley de represión al comunismo y persiguió y encarceló a los militantes populares. Intervino las universidades a las que consideró “centros de subversión y comunismo”, lo cual ubicó a las capas medias de la sociedad en la oposición a su política. Por su parte Perón, líder indiscutido del movimiento obrero y los sectores populares que se encontraba lejos de su país, estaba aun más lejos de enfrentar a Onganía: llamó desde su exilio en Madrid a “desensillar hasta que aclare”. Esto provocó en la dirección sindical una división en la CGT. Por un lado se alinearon los “participacionistas” en la CGT oficial y los “combativos”, gremios menores, en la CGT  de los Argentinos.

El surgimiento del clasismo

A mediados del ‘67 y durante el año 1968 se producen en el ámbito mundial una serie de convulsiones sociales, movilizaciones y surgimiento de una vanguardia que cuestionaba en las calles las bases de dominación capitalista. El Mayo francés, la Primavera de Praga , el ascenso del movimiento negro en EEUU y la guerra de Vietnam, entre otros grandes hechos, conmocionaron a las nuevas generaciones de obreros y estudiantes.

Este fenómeno político, en nuestro país, va a estallar en mayo de 1969 en Córdoba. El Cordobazo significó una movilización insurreccional que se fue gestando en una serie de estallidos locales en distintos puntos del país como Tucumán, Rosario y el Chocón y abrió una nueva etapa política asentada en el ascenso obrero, la radicalización de la clase media con los estudiantes a la vanguardia y la influencia en América Latina, de la Revolución Cubana. En el movimiento obrero se va a ir consolidando una camada de luchadores antiburocráticos y antipatronales que se extenderá a la mayor parte de los gremios. Surgirán dirigentes de la talla de Agustín Tosco, Gregorio Flores, José F. Páez y René Salamanca, entre otros. Estos dirigentes, desde sindicatos, comisiones internas y cuerpos de delegados arrebatados a la burocracia sindical peronista, serán la punta de lanza de una corriente clasista que tuvo expresiones en la mayor parte del movimiento obrero.

En 1970 los trabajadores de FIAT en Córdoba, organizados en los sindicatos de fábricas SITRAC-SITRAM, se encontraban discutiendo el convenio laboral. El burócrata Lozano firma  un acuerdo con la patronal pero los obreros en asamblea lo rechazan y nombran una Comisión Provisoria. La patronal se niega a reconocerla y el 14 de mayo los trabajadores de Concord ocupan la planta tomando como rehenes a directivos de la empresa. Dos días después la patronal reconoce a la nueva dirección obrera encabezada por el “Gringo” Carlos Masera como secretario general y dirigentes como Domingo Bizzi, Mortigliengo Clavero, Gregorio Flores y José F. Páez entre otros. El SITRAC-SITRAM levantará las banderas del clasismo y será uno de los puntales de la resistencia a la dictadura militar, llamando en agosto del ‘71 a un Plenario Clasista al que concurrieron organizaciones obreras y estudiantiles combativas. En marzo de 1971, un nuevo estallido en Córdoba conmociona al régimen militar: el Viborazo. Nuevamente obreros y estudiantes se enfrentan en la calle a las fuerzas represivas. El general Onganía ya había sido reemplazado el 8 de junio de 1970 en la Presidencia de la Nación por el general Marcelo Levingston ante la creciente movilización obrera y popular. Levingston también caerá ante este nuevo “Cordobazo” y asumirá la presidencia el general Alejandro A. Lanusse.

Una válvula de escape al ascenso obrero

La llegada de Lanusse al gobierno significa la puesta en marcha de una nueva política de apertura política de la burguesía y las fuerzas armadas que veían con preocupación cómo el país ampliaba el mapa de conflictos, movilizaciones y puebladas que eran la vanguardia en el cuestionamiento ya no sólo a la dictadura militar sino a las bases de sustentación y ganancias de los capitalistas en el país. Se instrumenta entonces el llamado Gran Acuerdo Nacional (GAN). Este acuerdo entre las principales fuerzas burguesas y los militares con el beneplácito de la burocracia sindical, planteó el llamado a elecciones a fin de establecer un régimen “democrático”. Esta política, como dijimos, era una válvula de escape a la presión del ascenso de las luchas.

Durante la presidencia de Levingston se había organizado “La hora del pueblo” donde convergieron peronistas, radicales, demócratas progresistas, conservadores populares y otros partidos burgueses, para reclamar que el gobierno permita la actividad política y convoque a elecciones. Por su parte el GAN va a ser implementado por el ministro del Interior Arturo Mor Roig y Daniel Paladino, secretario personal de Perón. Éste, que ante la llegada de Onganía había abierto expectativas, olfatea que la situación política en lugar de aquietarse sigue aumentando su ebullición. En noviembre del ‘71 reemplaza a Paladino como secretario personal y nombra a Héctor J. Cámpora y comienza a discursear desde una postura de oposición. Así, ante la creciente combatividad obrera y el desarrollo de las organizaciones armadas, llega a decir que si él “tuviera veinte años, también andaría poniendo bombas en la Argentina”.

Por su parte el gobierno de Lanusse, junto con la propuesta del GAN, seguirá reprimiendo las luchas, interviniendo gremios y encarcelando activistas políticos y sindicales. El 12 de octubre de 1971 la Gendarmería y la Guardia de Infantería ocuparan las plantas de Concord y Materfer encarcelando a 250 trabajadores terminando con la experiencia clasista del SITRAC-SITRAM. “El propio Rucci (2) convalidó el plan diseñado por el ministro San Sebastián y el presidente de FIAT Oberdam Sallustro (3) para descabezar los gremios SITRAC-SITRAM” (4). En abril de 1972 se va a conformar la Lista Marrón en el SMATA-Córdoba, dirigida por René Salamanca, de orientación clasista y el 22 de agosto de ese mismo año son fusilados 16 guerrilleros en la base naval Almirante Zar de Trelew, aumentando el odio de los sectores obreros y populares hacia el gobierno.

En el seno del activismo antipatronal y antiburocrático se desarrollan corrientes y organizaciones políticas de izquierda lo mismo que en el sector estudiantil. El llamado a elecciones abrirá un duro debate sobre qué posición asumir frente a la nueva propuesta política que tendrá una gran incidencia sobre la situación política.


1- “La actualidad de una experiencia en nuestro país.” SoB Nº 76 del 9/4/06. O. Alba

2- José Ignacio Rucci era secretario general de la CGT

3- Oberdam Sallustro fue secuestrado el 21 de marzo de 1972 por un comando del ERP y muere el 10 de abril de ese año cuando la policía llega a la casa en que lo tenían los guerrilleros y se produce un tiroteo.

4- Juan Iturburu. Revista “Los ´70”

Volver al sumario Volver al inicio