París.- La crisis fue primero
dejando sin empleo a los trabajadores precarios. Pero también,
desde hace meses, más y más sectores del primer círculo
de trabajadores “estables” también están siendo
despedidos. Ahora esa tendencia esta llegando nada menos que
a las grandes empresas, como la petrolera Total que va a
cerrar la refinería de Dunkerque, y quizás otras más, a
pesar de que realiza enormes beneficios.
La situación de los precarios, en su
mayoría mujeres, jóvenes, inmigrantes e hijos de
inmigrantes va de mal en peor. Ya desde hace tiempo se ve
gente buscando comida en la basura que botan los
comerciantes. Ahora conozco vecinos trabajadores que no
pudieron pagar la cuenta de luz y gas, y que pasaron mucho
frío en este largo y terrible invierno.
Los sueldos no alcanzan para
alimentar la familia, aunque los padres no estén
desempleados. Muchos hogares viven del crédito del
comerciante del barrio, que en Francia es generalmente un árabe
que tiene un comercio de víveres. Miles de mujeres solas
con hijos, aunque trabajen de manera precaria, deben ir a
los centro de ayuda, los “secours” (socorros) católicos
o laicos.
Según un estudio del Observatoire
Francais des Conjonctures Economiques (OFCE)1
de cada dos personas que perdieron
sus empleos entre 2007 y 2010, una por lo menos pasará por
debajo de la línea de pobreza. El 64,6%
de las más jóvenes se enfrentan a problemas de vivienda. O
no tienen, o viven en viviendas precarias, sin contacto con
sus familias.
La caída de los empleos “intérim” (precarios)
penaliza a las madres jóvenes. La proporción de mujeres
solas que buscan ayuda en los centros de la asociación “Secours
catholique” aumentó de 49,5% en 1989 a 60,3% en 2008.2
Es un rasgo mundial de la crisis, la pobreza tiene cara de
mujer.
En su informe de 2009-2010 presentado 24 de febrero 2010,3
el ONPES (Observatoire National de la Pauvreté et de
l'Exclusion) indica que ya en 2007 había 8 millones de
franceses (13% de la población) por debajo de la línea de
pobreza (calculada con un nivel de ingresos supermiserable),
porcentaje que dará un gran salto con el aumento formidable
de los “desempleados crónicos”, que tienen más de dos
años de paro. Después de ese plazo algunos pasan a cobrar
un mínimo (“minima sociaux”) que no alcanza ni
para comer.
No se sabe exactamente la cifra de desempleados, porque las
estadísticas oficiales no incluyen muchas personas que sólo
trabajan algunas horas al mes. Probablemente son mucho más
de 3 millones. Aunque, como dice un analista del millón de
desempleados llegará en 2010 al del seguro de paro sólo un
poco más de un tercio de los desempleados recibirían las
ayudas estatales, dado que la elegibilidad depende de los
recursos del hogar y no del individuo.4
En el medio de la campaña de las
elecciones regionales del 14 de marzo, los partidos
mayoritarios eluden hablar de la crisis. Sus medidas para
enfrentar a la misma les hacen perder votos, porque quieren
que sea el pueblo quien las pague. Ya Sarkozy habló de
aumentar la edad de la jubilación. Como él sabe que esta situación explosiva le puede provocar
en lo inmediato una derrota electoral, acaba de prometer
“cursos de formación” para los desempleados, que les
permitirían recibir un pequeño salario por algunos meses.
Pero es sólo una promesa porque el déficit del estado
francés es enorme, producto de las ayudas multimillonarias
otorgadas para salvar los bancos.
Notas:
1.-
« Perspectives 2009-2010 pour l’économie française »,
Lettre de l'OFCE Nº 314.
2.-
« La pauvreté en France concerne de plus en plus de
femmes », VEDURA, 06/11/09.
3.-
« Pauvreté : la crise aggrave la situation des plus
vulnérables », Vie Publique, le 26 02 2010.
4.-
« 1.000.000 de chômeurs en fin de droits, une vraie
bombe sociale », 20minutes.fr, 20/01/10
Francia:
En medio de importantes luchas
Los burócratas
sindicales llaman a otra jornada de
“paseo”, mientras
entregan los conflictos
Esta
vez será el 23 marzo. Los sindicatos llaman a una
“jornada” contra el plan del gobierno de aumentar la
edad de la jubilación, y eso en medio de grandes luchas
como la del gigante petrolero Total, en huelga desde el 12
de enero, llegando a amenazar el suministro de
gasolina. Habiéndose declarado en huelga indefinida, la
CGT se había visto obligada a “radicalizar” el
movimiento, dado que también trabajadores petroleros y de
otras refinerías también se pusieron en huelga en
solidaridad con los obreros de Dunkerque o amenazaban
hacerlo.
Sarkozy
debió intervenir exigiendo que se llegue a un acuerdo, y no
sólo por la amenaza de falta de gasolina sino porque esta
huelga estaba demostrando en Francia que es posible la
solidaridad entre trabajadores. Y que, por ese camino, es
también posible llegar a la huelga general. Pero los burócratas
del sindicato mayoritario, en este caso la CGT, entregó la
lucha después de “negociar” con la patronal. Aceptaron
una promesa de no echar trabajadores en cinco refinerías en
los próximos 6 años…. pero la refinería de Dunkerque,
epicentro de la lucha, será cerrada. Los trabajadores de
esta última repudiaron esa traición y no acataron el
llamado a trabajar de la CGT... pero en las otras refinerías
la burocracia logró que se comenzara a trabajar, rompiendo
así la unidad que se había logrado.
Durante
el 2009 y lo que va de este año los conflictos han tenido
fluctuaciones pero no han cesado. Los trabajadores se han
movilizado para impedir los despidos o lograr mejores
indemnizaciones, o por salarios, y en la educación por la
situación de los liceos que se degrada por la falta de
personal. Los trabajadores, con variados resultados,
lucharon contra los despidos en
Sanofi-Aventis, Goodyear, Saint-Gobain, Freescale
Toulouse, Philips (la
producción de televisión), Teleperfomance (gran centro de
llamadas de la empresa), Thales Avionics (aviación),
hospitales y un largo etc.