Desde Las Rojas y Carne Clasista, junto a otras
organizaciones de mujeres, feministas y LGTTBI, estamos
impulsando y llevando adelante una campaña contra el
asesinato lesbofóbico de Natalia Gaitán, reclamando
justicia para Natalia y cárcel para el asesino Daniel
Toledo.
Participamos de las reuniones de debate y coordinación
con el resto de las organizaciones y varias mujeres
independientes para poder convocar acciones conjuntas, ya
que consideramos de gran importancia la más amplia unidad
de acción para combatir todo tipo de violencia hacia las
mujeres y las personas LGTTBI. Destacamos lo imprescindible
de llegar a acuerdos comunes que fortalezcan la participación
y movilización, y por esto lamentamos que tanto la Federación
dirigida por María Rachid como La Fulana hayan decidido no
seguir participando de las reuniones.
Como actividad de la campaña contra la homo-lesbofobia y
por los derechos de las personas LGTTBI, el pasado 8 de
abril realizamos un escrache a la Casa de Córdoba (Vea
fotos), donde
estuvimos presentes para que este nuevo crimen de odio por
orientación sexual no quede impune y para denunciar y
difundir el caso (los medios de comunicación han hecho
nuevamente su silencio reaccionario), mostrando que no es un
hecho aislado sino que el asesinato de Natalia representa
los constantes abusos, discriminación, invisibilización,
violencia y torturas policiales que sufren las lesbianas,
los gay y las travestis a diario.
Fue un paso adelante haber realizado el escrache, al cual
se sumaron varias compañeras. Cortamos la avenida Callao y
realizamos un acto frente a la Casa de Córdoba. Desde Las
Rojas y Carne Clasista participamos varias compañeras y
compañeros haciendo mucho ruido con nuestra ya conocida
batucada y agitamos canciones como “A la Iglesia católica,
apostólica romana que se quiere meter en nuestras camas,
les decimos que se nos da la gana, de ser zurdas, travestis
y lesbianas…”
Intervenimos en el acto para denunciar a la Iglesia católica,
sus campañas reaccionarias contra los derechos de las
mujeres, contra el aborto, contra el matrimonio gay y como
institución al servicio de perpetuar la opresión de las
mujeres y las personas LGTTBI. Denunciamos la
responsabilidad del gobierno, que le abre la puerta a la
Iglesia para que se meta en la educación y la salud,
causando la muerte de cientos de mujeres al año por la
ilegalidad del aborto. Este gobierno de una presidenta mujer
que sale a reafirmar sus relaciones con el Vaticano, que no
garantiza educación sexual en las escuelas ni
anticonceptivos gratuitos en los hospitales.
Debemos seguir organizándonos para salir a pelear contra
este sistema capitalista y patriarcal que genera violencia
hacia las mujeres, que excluye y odia a las personas que
deciden no cumplir con el mandato heteronormativo que
impone. Por eso te invitamos a sumarte a la campaña y a
participar de las actividades contra la ofensiva de la
Iglesia, contra los ataques homo-lesbofóbicos y para
defender nuestro derecho a decidir sobre nuestra sexualidad
y sobre nuestro propio cuerpo.