
El 2 de abril del año pasado vivimos la peor inundación en la historia de La Plata. Una lluvia intensa puso en evidencia la situación terriblemente precaria de la ciudad, que se convirtió de “ciudad soñada” a pesadilla en tan sólo unas horas: obras hídricas, cloacas, servicios de electricidad; asistencia, comunicación y transporte; todo colapsó. Y quedó demostrado de lo que se trata la “racionalidad” en esta sociedad capitalista: todo...