Compartir el post "Asambleas de base y plenarios para unificar la lucha contra el gobierno"
Basta de pelear divididos –
El martes pasado ATE realizó un paro nacional y marchó en Capital hasta el Congreso junto a algunos gremios de la CTA-A y organizaciones sociales como la CCC, Barrios de Pie y la CTEP, en protesta contra el presupuesto de miseria presentado por el gobierno de Macri y en reclamo de la reapertura de paritarias y contra los despidos.
El paro y movilización fue anunciado por Cachorro Godoy por la TV, sin ninguna discusión con la base, ni perspectiva de continuidad. Después de anunciado el paro, la CTERA anunció para el mismo día también paro y movilización, pero al Ministerio de Educación.
A esta última convocatoria se sumó la conducción K de ATE Capital, que lejos de trabajar para la unidad de los y las estatales, dividieron la movilización! Las mezquindades de los burócratas alineados en las dos CTAno tienen límites: peleados por sus propios proyectos patronales, la Verde degenarista y la Celeste K dividieron la movilización de estatales y docentes, el único feliz fue el gobierno que evitó tener que bancar una movida fuerte si pegábamos todos juntos en Plaza de Mayo.
La jornada, lejos de reflejar y canalizar la bronca que hay contra el ajuste de Macri entre las bases estatales, más bien mostró la intención de la burocracia de movilizar solo al aparato, si la jornada no se prepara con asambleas previas, difícilmente los estatales se movilicen, igual no hay problema para eso llevan a las organizaciones sociales que le aportan el “número” para engordar la concurrencia. Mientras Cachorro Godoy gritaba en el escenario que se harán “20 paros si hace falta”, la adhesión al paro fue bastante baja.
Pero esto no es porque los estatales no entienden que al gobierno de Macri viene a que seamos la variable de ajuste. En los sectores de trabajo hay mucha bronca porque el sueldo no alcanza, y mucha preocupación por no saber qué va a pasar con nuestras fuentes de trabajo en los próximos meses, y las medidas aisladas e inconsultas sólo desalientan a la participación, nadie quiere “parar por parar”, sin un plan de lucha serio que nos lleve a ganarle a este gobierno.
A la dificultad de llegar a fin de mes con un sueldo estatal (lo que ya lleva a muchos compañeros a tener dos o tres empleos recontra precarizados para hacer un sueldo que alcance), se le suma el aviso del gobierno nacional de la nueva tanda de despidos que preparan para fin de año. Después de la primera ola de despidos de enero, cuando fueron echados 40 mil trabajadores sin distinción de profesiones, antigüedad, tareas realizadas, situaciones de cada trabajador y trabajadora, ahora prepara despidos “más ordenados”.
El Ministerio de Modernización ya está barriendo las reparticiones para obtener información que dé cuenta de la “real necesidad” de cada puesto de trabajo: está pidiendo informes de cada trabajador donde hay que detallar qué tareas se realizan en cada hora trabajada: llamados telefónicos, informes escritos, entrevistas, visitas, personas atendidas, etc. Con esa información determinará cuántos trabajadores “sobran” y así intenta “normalizar” la planta estatal: busca consumar una “dotación óptima y una estructura salarial más equilibrada y adecuada a las responsabilidades de los cargos”, es decir, una planta estatal bien chica con sueldos más bajos.
Esto es lo que se vive cotidianamente en las reparticiones estatales. El problema es que las medidas que convocan la burocracia no sirven para canalizar este malestar en una lucha consecuente. Lo que se empieza a ver entre los compañeros es que la burocracia “quemó” las herramientas del paro y movilización como herramientas que sirvan para luchar, y encima está el riesgo del despido y del descuento si parás: ya está en duda si con un paro y una marcha se va a cambiar a algo, y se termina optando por no adherir. La desconfianza que ya había hacia la dirigencia sindical ahora se trasladó a las propias medidas de lucha, un problema que nos desarma para enfrentar las medidas de ajuste del macrismo. Una maniobra ya demasiada conocida de la burocracia de ATE: desgastan a los compañeros con paros que no nos llevan a ningún lado, y cuando están todos re podridos les echan la culpa a los propios trabajadores de no querer luchar! Pero es la burocracia la única responsable de llevarnos a esta situación!
Es que la experiencia es concreta: a principio de año pasaron los despidos con la complicidad de la burocracia reaccionaria de UPCN, mientras ATE hacía que luchaba pero sin organizar de verdad la pelea. Después de que el gobierno vetara la Ley Antidespidos y las burocracias de todo pelaje traicionaron al no llamar al paro, quedó claro que si te echan, ningún sindicato te va a ayudar. Lo mismo ocurrió durante el año cuando nos cerraron paritarias que rondaban el 15% y nos reventaron los sueldos.
El problema es que para ganarle a Macri y su equipo de CEO’s ajustadores hay que pelear en serio! Los y las estatales estamos hartos de los paros testimoniales, de enterarnos por la tele, sin ninguna instancia de discusión y decisión. Queremos salir a pelear a las calles, como lo demostramos en la marcha federal del 2 de septiembre, cuando fuimos miles y miles contra el ajuste de Macri, porque cuando tenemos la oportunidad de organizarnos para luchar no la dejamos pasar. Un paro y una movilización aislada no alcanzan para frenar este gobierno. Hay que discutir en asambleas qué medidas vamos a tomar, qué objetivos nos vamos a poner y qué perspectiva le queremos dar a una pelea que somos nosotros, los y las estatales, quienes tenemos que protagonizar.
Desde la Lista Gris de ATE y la Corriente Sindical Carlos Fuentealba sostenemos que para pararle la mano al plan de ajuste de este gobierno reaccionario, necesitamos medidas de lucha contundentes, con perspectiva de continuidad y en unidad con otros sectores de trabajadores. Los y las trabajadoras tenemos que organizarnos en asambleas de base donde discutir con cada compañero y compañera qué medidas vamos a tomar. Y hay que exigirle a la burocracia de la Verde y la Verde y Blanca que convoquen a plenarios, y se dejen de dar vueltas con medidas aisladas, anunciadas por la tele y que en lugar de juntarnos con otros compañeros nos dividen! Y en esa misma perspectiva de unidad, la CGT y las CTA tienen que llamar a un paro general, del conjunto de los y las trabajadoras con movilizaciones en todo el país, para frenar el plan de ajuste del gobierno reaccionario.
Por la reapertura de paritarias.
Salario mínimo de $20.000.
Ni un despido más el Estado.
Que ATE llame a plenarios para discutir un plan de lucha para ganar.
Por un paro general de la CGT y las CTA.
Lista Gris ATE Corriente Sindical Carlos Fuentealba