Esta semana se llevó a cabo la 6° edición de la Expo Empleo Joven1 organizada por el gobierno porteño. Se realizó un gran despliegue mediático alrededor de este evento, que dio comienzo con los discursos de apertura de Mauricio Macri y Diego Santilli. No se iba a tratar de una edición más. Por un lado porque en unos meses están las elecciones legislativas en las cuales el macrismo se va a jugar el futuro de su gestión. Por esta razón decidieron darle al evento mucha más entidad de la que suele tener, el objetivo era que se vea al gobierno preocupado por el futuro de los jóvenes.
Pero mientras tanto, por otro lado, cientos de miles de jóvenes, provenientes de todos los puntos del conurbano bonaerense y de la Capital, se acercaron al predio de La Rural con la esperanza de obtener un trabajo. Alrededor de las instalaciones palermitanas se formaron filas interminables como las que acostumbran a tener los recitales. Pero acá nadie venía a participar de ningún espectáculo, sino a conseguir algo cada vez más escaso: un empleo.
La escena sorprendió a todos. El macrismo, con su cinismo habitual, proclamó el éxito de la convocatoria2. Pero la multitudinaria adhesión no se debió a un logro estratégico comunicacional, sino a una problemática cada vez mayor: la desocupación juvenil, que asciende a un 20%.
Pero no se trató solo de eso, sino también del deterioro de las condiciones económicas producto de las políticas de ajuste de Macri. Los jóvenes que sienten la necesidad imperante de conseguir un trabajo son cada vez más. Muchos de ellos incluso se ven obligados a abandonar o descuidar sus estudios. Por todo esto es que alrededor de 350.000 jóvenes se acercaron a una feria que prometía solo 11.000 nuevos puestos de trabajo, la mayoría de ellos en condiciones de precarización laboral. Y todo se vuelve más claro cuando comparamos este número con el de la edición de septiembre del 2016, a la cual asistieron 100.000 personas, es decir, 250.000 menos que ahora.
Este evento estaba armado para ser una fiesta de la precarización laboral: decenas de miles ‘peleándose’ por contratos precarizados o ad honorem, el sueño de todo negrero. Nada fue accidental, todo estaba en sintonía con el rumbo al que apunta Macri: aumentar las ganancias empresarias vía la reducción de los costos laborales, es decir, de los salarios. Ya el año pasado la Ley del Primer Empleo y el escandaloso contrato con McDonald’s indicaron este camino. El gobierno se la juega para que las nuevas generaciones accedamos al mundo laboral en condiciones mucho más adversas aún.
Pero, a pesar de todo esto, la necesidad empujó a cientos de miles con la esperanza de obtener algo. Y la gran mayoría salió con una desilusión y con una bronca absoluta, se sintieron estafados. La gran mayoría de las empresas, lejos de ofrecer empleos, se limitaron a entregar folletitos para que luego desde tu casa envíes por mail tu currículum. El martes por la noche en las redes sociales se leía a miles de jóvenes expresar un mismo mensaje: “Si piensan ir mañana a la Expo no pierdan el tiempo. Es una farsa”. Esta sexta edición dejó al descubierto la crisis que hay entre la juventud. Su efecto más inmediato y profundo fue reflejar el alto nivel de desocupación juvenil, dándonos el pie para apodarla como la Expo Desempleo Joven.
Con Macri no hay futuro para la juventud, solo trabajo precario (o directamente desempleo). La idea de tener un trabajo digno y bien remunerado se nos aparece cada vez más como un sueño cercano a la utopía. Pero no corresponde resignarse, recién estamos transitando nuestros primeros pasos en la adultez. Es hora de organizarnos y luchar para derrotar el ajuste de Macri, en la perspectiva de tirar abajo flagelos como el de la precarización laboral. Tenemos un mundo por delante, ¡ganémoslo para nosotros!
Julián Luciano
1- Exposición llamada para que jóvenes de entre 18 y 29 años puedan insertarse laboralmente o encontrar nuevas oportunidades laborales.
2 – “Estamos muy contentos porque, hasta el momento, la Expo Joven superó ampliamente las expectativas. Esperábamos 100 mil entre los dos días y solo el martes llegamos a 175 mil asistentes”. Fabián Pereyra, Director General de Políticas de Juventud de la Ciudad