Compartir el post "Córdoba: “Tengo más fuerza que nunca. No me voy a ir de aquí sin mi hijo Victorio”"
Frente al monumental palacio de Justicia, edificio donde reside el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba en la calle Caseros al 551, yace hace casi aproximadamente un mes una pequeña carpa con un cartel que dice “Huelga de hambre por la restitución de mi hijo” firma Gilda Morales 25 – 07 – 2017. A su rededor se expresan afiches con denuncias al Gobernador Schiaretti, funcionarios, fiscales y a la Jueza Silvia Morcillo del juzgado número 4 del Tribunal de Familia.
Gilda Morales es una de las tantas mujeres que denuncia el abuso judicial y la violencia sistemática por parte de la justicia patriarcal hacia cientos de mujeres, niños y niñas en Córdoba y quien ha elevado una denuncia penal a la Jueza Silvia Morcillo, el Fiscal Ernesto Rafael de Aragón y la Dra. Miriam Rebuffo, cómplices de la vulneración de los derechos del Hijo de Gilda de 7 años apartado de ella por un fallo judicial bajo un cambio de guarda ilegitimo por sanción: “por obstruir el vínculo con el padre”. Las difamaciones y el violento actuar por parte de los “magistrados” tuvo inicio en la causa de Gilda y Ricardo Galoppo en la mediación por restitución de vínculos. El padre del menor nunca pasó la cuota alimentaria correspondiente – Gilda es madre soltera, trabaja como docente – está denunciado por violencia familiar, amenazas y por abuso sexual, denuncia que aún no paso ninguna pericia psiquiátrica y que como es costumbre de la fiscal Chirino la causa se encuentra archivada – como es el caso de los niños y niñas del Collegium y muchos más – y sin investigar, porque Gilda Morales estuvo presa dicho y escrito por parte de la Fiscal. Sí Gilda también fue privada de su libertad, a su hijo se lo llevan con la policía federal sin intervención de asesores de menores donde se inventa un delito de secuestro sin una causa iniciada y que se pueda probar por parte de la Justicia de Córdoba, proceso que estuvo a cargo el Fiscal Aragón solo bajo una denuncia por parte de Galoppo y su Abogado Nicolás Giraudo – Docente en la materia Familia en la Facultad de derechos, UNC- , quien declaró públicamente en algunos medios: “Están las dos detenidas porque el delito que se les ha atribuido es importante y han tenido actitudes ilegitimas y antijurídicas”.
Ilegitimo y antijurídico es el actuar de esta Justicia misógina que no falla a favor del hijo de Gilda quien fue obligado a separarse de ella hace ya un año y siete meses , que explícitamente falló en contra de Gilda y su hijo ignorando las graves denuncias que tiene Ricardo Galoppo, desoyendo incluso el pedido del CATEMU (Equipo Auxiliar Técnico Multidisciplinario), donde aseguraron que el cambio de guarda era inviable, dado que el padre no estaba apto para tener al niño y que lo recomendable era otorgarle visitas asistidas. Las visitas asistidas las tiene ahora Gilda luego de 10 meses sin poder ver a su hijo y ante múltiples pedidos que presentó, bajo una decisión arbitraria de la Juez Morcillo. Ciertamente, este no es el único caso, son más de 200 denuncias por abuso judicial, Morcillo actúa y falla a favor de padres denunciados por abusos contra la integridad sexual de menores, son decenas de menores a quienes recurrentemente revincula con sus agresores.
Desde que Gilda dio a conocer su caso hasta el día de hoy, donde llevó adelante 19 días de huelga de hambre, ha conseguido gran apoyo por parte de la sociedad, somos cada vez más quienes venimos acompañándola. En estas últimas semanas hemos realizado múltiples acciones denunciando a las instituciones vinculantes: en Tribunales I donde está Gilda y su denuncia presentada, en el SeNAF (Secretaria de Niñez y Adolescencia Familiar), y en Tribunales de Familia donde está la Jueza Silvia Morcillo. En este proceso Gilda aún continua siendo violentada por el poder judicial en reiteradas oportunidades, incluso desde el SeNAF la agredieron físicamente, constantemente se la amenaza con llevársela presa, llegando al punto de mandar una ambulancia con la idea de internarla en el hospital neuropsiquiátrico y hacerla pasar por loca. Claramente ese es el modo de actuar por parte de la justicia, el estado y el gobierno de Macri y Schiaretti, quienes vienen llevando adelante un brutal ajuste y el vaciamiento de las aéreas sensibles de asistencia a mujeres, niños, niñas y adolescentes. Amedrentan con su policía y funcionarios a quienes salimos a reclamar y luchar por nuestros derechos, un gobierno y una justicia responsables de la desaparición de Santiago Maldonado, y que a las mujeres en estos casos quieren hacernos pasar por locas y mentirosas. Desde Las Rojas entendemos que la justicia patriarcal y el Estado y su gobierno no están para defender los intereses de nuestros reclamos más sentidos, todas las conquistas y triunfos que hemos conseguido han sido gracias a la movilización y las acciones que hemos llevado adelante de manera independiente. Si bien, Gilda hoy no continúa con la huelga de hambre para preservar su estado de Salud y continuar luchando, se mantiene firme: “Tengo más fuerza que nunca. No me voy a ir de aquí sin mi hijo Victorio. No les importó mi estado de salud, estar aquí y la presión social es lo que más les molesta.”
En ese sentido, Las Rojas continuaremos acompañando y exigiendo el pedido de Restitución del Hijo de Gilda Morales y la destitución de la Juez Silvia Morcillo, funcionarios, jueces y fiscales cómplices de la violencia hacia las mujeres, niños y niñas y hacemos responsables al Gobierno de Macri y Schiaretti por la integridad física de Gilda y ante la falta de respuesta de sus funcionarios. Extendemos nuestro llamado a seguir movilizadas y a ser cada vez más y a seguir acompañando el reclamo de Gilda y las acciones que se lleven adelante. Por todos los casos de abuso que recaen sobre la Juez Morcillo y demás fiscales, funcionarios y jueces vinculantes. ¡Gilda no está sola!
Las Rojas Córdoba.