La situación política abierta luego de las elecciones PASO de agosto puso al gobierno nacional en una ofensiva reaccionaria configurando una situación adversa para los trabajadores. Decidido a endurecer la represión y la política en contra de los luchadores, como lo son los despidos y el caso de la desaparición del joven Santiago Maldonado. De esta manera, Macri busca derechizar la sociedad en contra de las luchas y preparar el terreno para después de las elecciones de Octubre pasar un durísimo ajuste a los trabajadores. En este contexto se está desarrollando la lucha de los compañeros de MAM, que ya lleva más de dos meses, con la ocupación de la fábrica, exigiendo la reapertura de la planta con todos los trabajadores adentro. Y por otro lado, una patronal que inventó una crisis que no tiene, ya que el grupo BM compró desde hace año y medio la fábrica y cuenta con millones de pesos de sus empresas de servicios petroleros, ni qué decir que la empresa MAM SA venía de un éxito en producción y ventas.
Las intenciones de esta patronal tiene que ver con destruir los puestos de trabajo de esta fábrica para expandir el negocio petrolero que le genera más rentabilidad, a costa de la pérdida de empleo de obreros que cuentan, en su gran mayoría, con veinte o treinta años de antigüedad. El proceso de lucha, que se inició en un primer momento en la toma de fábrica y la colaboración de la población al fondo de lucha en cada volanteo en ruta 7, fue cambiando debido a la falta de respuesta del gobierno y la patronal, realizando así un corte en ruta 7, que contó con la presencia de los sectores combativos de trabajadores de la región, como las trabajadoras textiles, ceramistas, trabajadoras de limpieza de la UNCo (Universidad Nacional del Comahue) y el Centro de Estudiantes de Humanidades de la UNCo. Acción que llevó al gobierno a generar una mesa de negociación, la cual la patronal echó por tierra, presentando una lista negra de 15 activistas y delegados que no entrarían en una hipotética reapertura, luego declarándose insolventes y que remató con la amenaza de ingresar con la fuerza policial a la planta y desalojar, en sintonía con la política del gobierno nacional y con la complicidad del MPN.
El gobierno, cómplice del intento de cierre de la planta y de los despidos, y el sindicato de los madereros que no ha convocado a una sola acción de conjunto de los obreros del sector para que la lucha triunfe; esto es así porque es parte de la alianza con el gobierno y la patronal para que los trabajadores sean derrotados. Los obreros han respondido a la patronal y al gobierno con asambleas de base y endureciendo la lucha demostrando que ese es el camino para su triunfo, como lo demostró la movilización desde el portón de la fábrica a Casa de Gobierno del último miércoles 20 de septiembre, logrando conseguir una reunión con el gobernador Gutiérrez. Desde el Nuevo MAS apoyamos con fuerza y presencia la lucha de los obreros de MAM. Es necesario rodear de la solidaridad de todos los sectores combativos esta lucha y creemos correcto el camino de endurecer la pelea para destrabar el conflicto y lograr la victoria de los obreros, que será la victoria de todos.
Lista Gris Carlos Fuentealba Neuquén. Corriente sindical del Nuevo MAS