Este martes 7/11 el gobierno lanzó la segunda etapa del “Operativo Aprender” (la primera había sido en 2016). Como dijimos la semana pasada en ocasión del “Enseñar” en los terciarios, el “Aprender” no era otra cosa que una prueba estandarizada que tiende a sentar las bases sobre las que se aplicará la reforma educativa (Plan Maestro), que busca precarizar más aún el trabajo docente mientras crea mano de obra servil a los intereses empresariales.

Evaluar: ¿qué y para qué?

El gobierno plantea la discusión sobre el “Operativo Aprender” partiendo de una falsa premisa: “los docentes se oponen a evaluar”. Ya en ocasión del primer “Aprender” el bufón preferido de Cambiemos, Jorge Lanata, hablaba de que era entre patético y gracioso que los maestros se opusieran a los exámenes, en una nota cargada de odio y patético cinismo. Nota que prácticamente repetiría hace unos días (demostrando que no sólo es patético sino poco original) preparando el terreno del “sentido Común” de los votantes de Cambiemos y alguna gente más para esta nueva farsa.

Decir que los docentes se oponen a evaluar porque se oponen al “Aprender”, es como decir que si me quejo porque me dan un martillazo en la cabeza es porque estoy en contra de los martillos en general. Aquí lo que hay que preguntarse es si uno realmente cree que hay que mejorar aspectos de la educación (y claro que hay que mejorar) es qué se evalúa y para qué.

Este martes los docentes “facilitadores” y sus estudiantes nos encontramos con preguntas como: ¿cuántas veces los estudiantes de tu escuela roban?, ¿los maestros te vuelven a explicar si no entendés?, ¿los maestros de tu escuela escuchan tus preguntas? o ¿los estudiantes dañan las cosas de la escuela? Preguntas que más allá de parecer un interrogatorio policial en lugar de una prueba sobre conocimientos, son elegidas en lugar de otras como: ¿cuántas veces tus compañeros o tu maestra te prestan útiles?, ¿en qué se ve la ausencia del Estado en tu escuela?, ¿es suficiente la merienda/desayuno?, ¿cuántas veces los docentes pagan los materiales de su bolsillo?, ¿tus docentes te ayudan con cosas que exceden lo pedagógico?

Es en base a ese falso sentido común que el gobierno avanza sobre la educación; eso se evidencia en las palabras del ministro Finocchiaro: «Hace diez años, este tipo de evaluaciones estaban mal vistas. Ganamos una batalla cultural, ahuyentado fantasmas en torno a las evaluaciones».

Está más que claro que aquí no es el problema “evaluar” en general, sino que este tipo de evaluación (que además no es continua, como recomiendan la gran mayoría de las escuelas pedagógicas) busca estigmatizar la educación pública y a sus trabajadores en pos de un cambio de paradigma que sea 100% beneficioso para las empresas y que reduzca los gastos sociales del Estado.

Lo que NO es importante aprender para el “Aprender”…

Hay que decir que no sólo fueron preguntas de interrogatorio policial las del Operativo, también hubo algunos ejercicios en los que casualmente faltaban los mapuches en los mapas sobre aborígenes argentinos, porque en realidad lo importante para el gobierno es que los chicos sepan leer y escribir y las operaciones básicas de matemáticas, las ciencias sociales son peligrosas, no vayan a saber que quienes gobiernan en nombre de la trasparencia son los mismos que vienen comiendo de la teta del Estado desde épocas fundacionales. Y ojo con Naturales, no vaya a ser que las mujeres se den cuenta de que son dueñas de su cuerpo y se les ocurra querer decidir sobre el mismo… Aquí lo importante es saber leer y hacer algunas cuentitas, de la formación ideológica se encarga la TV…

Y ojo, que no es que lo decimos nosotros, la propia secretaria de Evaluación Educativa, Alejandra Duro dijo que: “En el secundario, se evaluarán conocimientos de Lengua –la interpretación y reflexión de textos literarios y no literarios– y Matemáticas –resolución de problemas–. En este año, los estudiantes próximos a egresar no responderán sobre Ciencias Sociales y Naturales” y agregó que: “Consideramos que Lengua y Matemática son las dos materias irrenunciables, de las que no nos vamos a mover porque abren puertas al conocimiento, pero sí evaluamos en los próximos años incorporar nuevas asignaturas en la evaluación. Por caso, Ciudadanía», es decir, quizá, si se les ocurre le dan algo de bolilla a que los estudiantes sepan sus derechos y su historia.

Rechazamos el “Operativo Aprender” y los planes del gobierno de destruir la educación pública precarizando cada vez más el trabajo docente

Como venimos diciendo en estas páginas, el “Operativo Aprender” va de la mano de la contra reforma educativa del Plan Maestro, dado que estas evaluaciones son el puntapié para pasar a evaluar desempeños docentes y de las escuelas con el objetivo de bajarnos los salarios a través del mérito por un lado, y desfinanciar a las escuelas que obtengan bajas calificaciones, por el otro. Pretende estandarizar el conocimiento según las necesidades del mercado y no del desarrollo de los estudiantes, para quienes prepara pasantías gratuitas y una «incertidumbre» en su futuro laboral.

Los resultados, que ya se saben de antemano, se usan para culpar a los docentes del mal desempeño de los estudiantes, usándolos como chivos expiatorios de las verdaderas intenciones del gobierno, dejando de lado el estado de las escuelas, los problemas sociales, el salario y demás.

Por eso desde la Lista Gris – Carlos Fuentealba rechazamos este Operativo que no aporta nada al mejoramiento de la educación, sino que es la base de futuras reformas que terminarán por perjudicar a la educación.

Denunciamos el silencio del Frente Gremial ante el “Operativo Aprender” y las reformas que se vienen, por lo cual exigimos que convoquen a un Plenario de Delegados para poner en pie de lucha a toda la docencia.

Rechazamos con todas las fuerzas al “Operativo Aprender” y todas las maniobras que se desprenden del mismo, mientras invitamos a la docencia a organizarse para frenar esta ofensiva en contra del trabajo docente y la educación pública…

LISTA GRIS – CARLOS FUENTEALBA – ZONA NORTE

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