Facundo M.

A un año de los acontecimientos en Pu Lof Cushamen, donde la gendarmería bajo el mando de Patricia Bullrich reprimió a los manifestantes que reclamaban por la libertad del Lonko Facundo Jones Huala, las pericias oficiales sobre la autopsia de Santiago Maldonado son puestas nuevamente en cuestión.

La polémica surge a raíz de un informe escrito por el licenciado en criminalística Enrique Prueger, en el cual se cuestionan irregularidades e incongruencias en el informe de la autopsia oficial. No olvidemos que el gobierno de Macri puso en acción por esos días toda una batería de hipótesis falsas sobre Santiago para sembrar la confusión: que podía estar en Chile, que lo habían visto por las rutas argentinas, o que los mapuches lo habían sacrificado, que había “un pueblo entero en el que todos se parecen a Santiago (¡). Y ni hablar de la campaña estigmatizante contra los mapuches para crear la idea de que eran «terroristas», justificando así el accionar de las fuerzas represivas y el cobarde asesinato de Santiago.

Una vez aparecido el cuerpo, apoyado en la autopsia oficial, el gobierno se encargó de instalar la idea de que «se ahogó sólo porque no sabía nadar», que «la gendarmería no tiene nada que ver», quitándole toda responsabilidad. El triunfo electoral de Cambiemos pocos días después de la aparición del cuerpo terminó de cerrar la crisis política coyuntural que venía sufriendo el oficialismo producto de la campaña encabezada por la familia y los organismos de DDHH.

En ese marco, el informe de Prueger es importante para clarificar con argumentos el montaje de la autopsia oficial.

El Informe

La hipótesis central del informe es que el cuerpo de Santiago de ninguna manera pudo haber estado sumergido 78 días. En sintonía con la familia, que cuestionó el hecho de que en rastrillajes previos por el lugar donde finalmente apareció el cuerpo no hubieran podido hallarlo, opina que el cuerpo simplemente «fue plantado».

La presencia de polen en el pantalón de Santiago al momento del hallazgo del cuerpo es uno de los argumentos fuertes. Según el especialista, los 28 peritos que firmaron la autopsia en noviembre de 2017 «ignoraron a sabiendas» el punto 10 del informe de la bióloga y palinóloga Leticia Povilauskas que se encontraba en la página 54 en el que precisó el tiempo que el polen podía permanecer en la ropa de Santiago.

«Bajo ningún punto de vista los granos de polen encontrados en las muestras peritadas, pueden permanecer adheridos a las prendas anteriormente citadas, sumergidas en el lugar del hecho descripto por un período de tiempo prolongado teniendo en cuenta la mínima velocidad que pueda tener la corriente de flujo en el río (sin mencionar si existieron crecidas por precipitaciones o deshielo), la energía presente en el medio acuático y la cantidad de oxígeno removido en el lecho (lo que hace un medio aeróbico). Todas estas condiciones hacen que el polen se desprenda fácilmente de las ropas, sobre todo en materiales de nylon tipo impermeable como es el caso del pantalón, en el cual se detectó gran cantidad de palinomorfos. Lo que significa que en un lapso de tiempo no mayor a 20-30 días, no estaríamos en presencia de granos de polen adheridas a las ropas” afirma el especialista.

Prueger además realizó un experimento para demostrar como errónea la afirmación de los peritos oficiales, que dicen que el cuerpo permaneció en el río Chubut 53, 60 o 73 días, en la que demostró, sumergiendo un trozo de carne de 998 gramos en el río y pesándolo semanalmente, que la disminución de masa provocada por la descomposición del agua y la fauna del lugar llegó al 50% en 45 días.

«El cuerpo de Santiago Maldonado, que se dice estuvo en el agua durante 78 días, tenía las papilas de los dedos de las manos y en condiciones por haber sido identificado mediante el procedimiento respectivo, los tatuajes en la espalda se podían distinguir y presentaba apenas algunos mordiscos de fauna, como si ese cuerpo hubiera permanecido en el agua pocos días». “El experimento que hicimos revela que es imposible que el cuerpo de Santiago haya podido permanecer allí sin experimentar una descomposición y ataque de la fauna presente en el lugar». Precisó.

Otro cuestionamiento clave para desmontar los argumentos oficiales refiere a la mala utilización de las temperaturas del agua en la autopsia. Para la misma se trabajó con la tabla de REH, que se basa en temperaturas promedio, pero se tomaron como parámetro los resultados más bajos. “Los registros corresponden a temperaturas promedio y deben ser consideradas desde la fecha de desaparición hasta el hallazgo del cuerpo, pero en el caso de Santiago no se trabajó con las temperaturas promedio sino con la mínima de los días de la desaparición”, precisó Prueger.

Todos estos elementos refuerzan lo que desde la izquierda venimos señalando desde el primer día. El gobierno y la gendarmería tienen absoluta responsabilidad en la desaparición y asesinato de Santiago y utilizaron todos los medios a su disposición, incluso el falseo o interpretación arbitraria de datos científicos, para eximirse de toda responsabilidad frente a la opinión pública.

Justicia por Santiago Maldonado

Sólo una investigación independiente, apoyada en la movilización, los organismos de derechos humanos y las organizaciones de izquierda puede echar luz sobre los acontecimientos y lograr castigo a los culpables del asesinato de Santiago, la expulsión de Bullrich y el castigo a los gendarmes que participaron en la represión, entre ellos Emanuel Echazú, quien muy probablemente fue el autor material de su asesinato.

El informe es un punto de apoyo importante para señalar la responsabilidad del gobierno en el asesinato de Santiago, en momentos en que Macri ensaya un giro represivo «habilitando» al ejército a intervenir en los asuntos de seguridad nacional, preparándose para los fuertes choques sociales que seguramente se producirán producto del brutal ajuste que exije el FMI y que el gobierno está llevando adelante contra el pueblo trabajador.

La clave es mantener la movilización en las calles, exigiendo justicia por Santiago a un año de su desaparición y asesinato, enfrentando a este gobierno que cada día muestra más claramente su rostro reaccionario y capitalista.

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