Compartir el post "Firestone – Basta de persecución a Maxi Cisneros"
Como saben todos los compañeros de la fábrica, el “Mosqui” Cisneros fue despedido hace casi tres años por organizar a sus compañeros contra la patronal y la Lista Violeta, por hablar en una asamblea y por enfrentar las condiciones de trabajo. Después de una dura lucha que incluyó marchas a los juzgados, actos en la puerta de la fábrica, cortes en el centro, etc., se consiguieron dos fallos de la justicia que ordenaron reinstalarlo, con el argumento de que el suyo había sido un despido “discriminatorio” y que por lo tanto, afectaba un “derecho humano elemental”. Y que la única manera de solucionarlo era que volviera a su puesto de trabajo.
En diciembre se va a cumplir un año desde que la empresa dice que acató el fallo. Pero desde el mismo momento ha venido maniobrando para que no sea tal cual lo ordena la justicia; es decir, se burla de la justicia argentina.
En un primer momento lo mandaron al galpón de Monte Chingolo a contar cubiertas. Cuando esto fue insostenible, ingresó a la planta, pero lo tienen en el quincho inventándole cualquier tarea, bajo la supervisión directa de 3 ó 4 de recursos humanos.
La empresa está aterrada de que pueda tener algún contacto con los compañeros, por eso además le puso un horario que no concuerda con los turnos de la fábrica, lo hacen marcar tarjeta, y lo llevan al quincho por el perímetro de la planta. Durante este tiempo le inventaron tareas, lo suspendieron con falsas excusas, le liquidaron mal el sueldo, etc. Todas medidas que apuntan a mellar la moral del compañero y a tenerlo lejos de su sector para que no sea delegado.
Esta situación está en consonancia con la que viene ocurriendo en las últimas semanas: suspensiones, despidos, licenciamientos, etc. Desde estas páginas venimos denunciando y alertando sobre los planes de la empresa.
Llamamos a todos los compañeros a estar alertas ante las arbitrariedades, a pararle la mano a los despidos y suspensiones, y a evitar las maniobras de la patronal que impiden que Cisneros esté donde le corresponde: en su puesto de trabajo en Cubiertas Grandes.