Primero quiero saludar a este hermoso acto que de acá arriba se ve bárbaro. Un poco contar cual es el proceso que estamos viviendo en el hospital que es un proceso enorme. Supongo que muchos sabrán, por ahí algunos no, que el 13 de noviembre Emanuel, un camillero del Hospital Posadas, perdió la vida trabajando para la salud publica mientras trataba que un paciente psiquiátrico no se tire de la terraza que esta del octavo piso del hospital. Lamentablemente, terminaron cayendo los dos y hubo una frase que cruzo todo el hospital esa mañana que fue “a Emanuel lo mató la desidia” porque todos nos dimos cuenta que esa era una muerte evitable.

Nosotros trabajamos en un hospital nacional, uno de los tres o cuatro hospitales que dependen directamente del Gobierno Nacional, donde trabajamos en condiciones de extrema precariedad. Prácticamente, no hay materiales, ni insumos básicos, los pacientes hacen horas y horas de cola y después no se los pueden atender porque no hay Pervinox, ni guantes descartables, ni barbijos. Todo el tiempo estamos exponiéndonos no solo nosotros, sino a todos los pacientes que recurren al hospital publico que son de los sectores mas vulnerables de la sociedad y nosotros tenemos que brindarles la mejor salud posible. Sin embargo, este gobierno lo único que ha hecho en todos estos años es vaciar la salud pública, vaciar los hospitales.

En el caso particular del Hospital Posadas se suma que nosotros somos más de 4000 trabajadores y el 80 por ciento de esos trabajadores estamos precarizados, todos con distintos contratos, algunos llegan a 20 o 22 años de contrato. Eso quiere decir que no tenés antigüedad, que cobra el mismo sueldo el que tiene 22 años trabajando y el que recién empieza.

Todo esto con un gobierno que lo único que ha hecho en estos años es poner plata para construir una parte nueva, que es un edificio que incrustaron en el medio del edificio histórico, todo de vidrio y al que nosotros llamamos puerto madero. Otros le llaman  la rosadita porque ahí mando cristina a todos los de La Cámpora y ahora esta aterrizando Nuevo Encuentro también. Lo que ellos quieren tapar es lo que esta detrás que no es lo que ellos llaman una villa sino el edificio histórico del hospital que es donde trabajamos los miles de trabajadores, donde se atiende los miles de pacientes, porque es donde están los lugares mas importantes de atención: los quirófanos, las guardias, los laboratorios, las internaciones. El hospital esta que se cae y eso es lo que quieren tapar con el edificio nuevo.

A partir de la muerte de Emanuel todos decimos que hay un antes y un después porque la respuesta de todos los trabajadores fue contundente e inmediata, a pesar de que todos los burócratas de ATE y UPCN hicieron todo lo posible para que no pase nada, logramos cortar dos veces la autopista y el segundo día éramos casi mil trabajadores cortando la autopista. Haciendo una asamblea ahí mismo donde votamos que se tenían que ir todos, que íbamos hacer un paro por tiempo indeterminado hasta que viniera el Gobierno Nacional directamente a solucionar todos los problemas por los que estamos peleando, que no íbamos a permitir que la muerte de Emanuel fuera en vano.

Están intentando hacer creer que estamos usando la muerte de Emanuel para hacer política y, sin embargo, parte de esto es la mamá de Emanuel, que es enfermera del hospital y que viene a las asambleas. El otro día vino al Ministerio de Salud porque es parte de la lucha y ella también considera que la muerte de su hijo no tiene que ser en vano.

Al calor de todo este proceso ha surgido todo un sector de cientos de trabajadores que están empezando a hacer sus primeras herramientas de lucha, sus primeras experiencias, no solo en contra del gobierno, sino también contra los burócratas de ATE y UPCN que vienen tratando de desarmar todo, desde el primer día se borraron y después aparecieron para levantar el paro, fue lo único que hicieron, Los trabajadores les dijimos que no, que vamos a seguir peleando porque hasta que no consigamos todo no vamos a parar.

Ahí es dónde entra el Nuevo MAS, porque tengo el orgullo de ser parte de esa vanguardia y parte de ese activismo que le esta poniendo el cuerpo. Hemos hecho de todo: carteles a mano, banderas, pancartas, recorremos los hospitales… En mi sector, que es un sector que se ha vuelto muy combativo, donde hay administrativas, médicos y técnicos, hemos formado una agrupación que se llama RH Combativo porque la idea es aportar a este proceso, que mediante las asambleas y mediante los métodos de los trabajadores todos entiendan que no nos van a derrotar fácilmente porque vamos a estar ahí y vamos a seguir dando la lucha.

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