Discurso de Héctor "Chino" Heberling, precandidato a presidente por el Nuevo MAS



 

 

 

¡Buenas tardes compañeros y compañeras!

¡Estoy muy contento y orgulloso de estar frente a todos ustedes en este gran acto que muestra un salto de nuestro partido en su construcción, con delegaciones de todo el país, con esta nueva generación partidaria que está construyendo el Nuevo MAS!

Estamos terminando un año intenso, de mucha actividad, de alegrías y sinsabores. Un año donde Las Rojas siguen a la vanguardia de la lucha por los derechos de las mujeres, un año donde el partido y la juventud se templaron en la dura lucha de GESTAMP y un año que lo estamos terminando con un gran triunfo que es haber conquistado la legalidad nacional.

Este logro compañeros, entendámoslo, nos coloca en un plano superior, donde tendremos que responder a las desafíos que tiene la izquierda argentina de igual a igual con los otros partidos.

 

¡Compañeros y compañeras!

Se está transitando el fin de ciclo del kirchnerismo, una gestión cuyo balance puede ser abordado desde dos puntos de vista distintos, según se trate de los patrones o los trabajadores.

A favor de la burguesía está el hecho que los esposos K lograron sacar al país de la convulsión más grande en las últimas décadas, estabilizaron hasta cierto punto la Argentina y recuperaron en cierta medida las instituciones de la democracia de ricos. Este elemento no es menor: le está dando una previsibilidad desacostumbrada al recambio presidencial del 2015.

Sin embargo, cabe otro señalamiento de mayor importancia estratégica. Es que aún con el “viento a favor” de una economía mundial que vio precios históricos para las materias primas en la última década, el kirchnerismo no logró resolver ninguno de los problemas estructurales que aquejan a la economía argentina.

La crisis devaluatoria que se vivió en enero pasado mostró como la Argentina capitalista, es un país incapaz de generar suficientes divisas para sus relaciones económicas con el mundo.

Se trata de una fragilidad histórica que la burguesía argentina jamás fue capaz de resolver, más allá de algún roce, la realidad es que las clases dominantes en la Argentina siempre aceptaron  tener un  lugar subordinado en el orden mundial dictado por el imperialismo.

El kirchnerismo no es la excepción, armaron un relato vacío de contenido, y repitieron durante años frases como “comprar soberanía pagando” o el famoso “desendeudamiento”, para terminar ahora en un rotundo fracaso.

La realidad es que en el 2015 el gobierno de Cristina se apresta a iniciar un nuevo ciclo de endeudamiento, el que se vendrá a sumar a los 200.000 millones de deuda que dejarán los K luego de su gestión.

Son miles de millones que se siguen pagando al imperialismo y que deberían ser utilizados para mejorar los ingresos y la calidad de vida del pueblo argentino.

Esto nos plantea la necesidad de retomar una bandera histórica de la izquierda argentina. Por eso en la campaña electoral del Nuevo MAS propondremos relanzar la lucha por el ¡no pago de la deuda externa!

Al escándalo de la deuda le debemos agregar una entregada más, como respuesta a la crisis de infraestructura y de abastecimiento energético; a Cristina y Kicillof  sólo se les ocurrió una cosa, escondieron el relato bajo la alfombra y entregaron Vaca Muerta a las multinacionales como Chevron para que “vengan a resolver” los problemas del abastecimiento energético!

 

¡Compañeras y compañeros!

En los últimos años se está viviendo un retroceso en las condiciones de vida de los trabajadores. No se vive todavía una catástrofe como en el 2001, frenada esencialmente por la reacción desde debajo de los trabajadores y sectores populares que obligaron a los capitalistas a hacer concesiones para evitar que se pudriera todo.

Pero la caída del salario que se está viviendo y los 500.000 desocupados más que ha dejado este año de ajuste K, están ahí para certificar lo que estamos diciendo: ¡que el “ajuste nacional y popular” lo estamos pagando los trabajadores con nuestros bolsillos y la pérdida de los puestos de trabajo!

Y queremos alertar que cualquiera sea el gobierno patronal que vaya a ser electo en el 2015, su tarea será venir a redoblar el ajuste económico; para que seamos nosotros los que paguemos las cuentas de la crisis y así garantizarles las ganancias a los capitalistas.

¡Macri, Massa, Carrio, Cobos o Binner, candidatos de la oposición patronal, sólo se distinguen del gobierno en que el ajuste que pregonan por lo bajo, es igual o mayor que el que lleva y seguirá llevando adelante el oficialismo, hoy de la mano de Cristina o mañana de la mano de Scioli!

Por eso nuestra campaña electoral tendrá un mensaje claro para todos los trabajadores, para castigar al gobierno la alternativa no son los candidatos patronales, la alternativa son los candidatos obreros y socialistas del Nuevo MAS.

 

¡Compañeros y compañeras!

Hay otra gran cuenta pendiente de los K que la burguesía se encarga de reclamarle todos los días: a pesar de su represión a las luchas, de la militarización en conflictos como Gestamp y Lear, no fueron capaces de revertir las relaciones de fuerzas creadas por la rebelión popular del 2001 y que hacen de la Argentina lo que podríamos llamar “un país movilizado”.

Todo tipo de experiencias de lucha y movilización se han vivido en los últimos años en nuestro país, la más estratégica de las cuales tiene que ver con la creciente presencia de la izquierda entre sectores de trabajadores.

Hemos escuchado a nuestros compañeros del neumático comentando como en dicho gremio la izquierda tiene la oportunidad de disputar un gremio industrial nacional. Pero también podemos subrayar experiencias estratégicas como la heroica lucha de Gestamp, donde nuestro partido se jugó entero en la pelea contra la Santa Alianza del gobierno, las multinacionales automotrices y la burocracia del SMATA, que querían barrer su experiencia.

Es verdad que luchas de vanguardia, como las de Gestamp y también Lear salieron derrotadas; pero toda organización revolucionaria que se precie de tal, debe hacer balance y sacar las enseñanzas para trasmitirlas a las nuevas generaciones de trabajadores.

Tenemos el enorme orgullo de decir que nuestro partido fue un factor decisivo para una pelea obrera que colocó sobre el tapete la recuperación de los métodos históricos de lucha de la clase obrera argentina y que llevó a la mismísima Cristina Kirchner a contestarles públicamente a los trabajadores, cuando con su acostumbrado tono antiobrero, les señaló a los trabajadores  que estaban en el puente grúa, que estaría fuera de la agenda histórica la “toma del Palacio de Invierno”: es decir, la toma de las fábricas, e, incluso la toma del poder por parte de los trabajadores.

¡La verdad es la contraria! ¡Estamos viviendo un reinicio en la experiencia histórica de nuestra clase! ¡El comienzo de una experiencia que de madurar podría volver a colocar en la agenda histórica la transformación socialista de la sociedad en su sentido más auténtico, como autodeterminación de la clase obrera disputando el poder político!

Y de ahí la necesidad de levantar una alternativa socialista unificada para las elecciones del 2015

 

Compañeros y compañeras

Esto es lo que nos lleva a las enormes responsabilidades que la izquierda tiene en nuestro país.

Es verdad que en la coyuntura se vive una transitoria estabilización. Pero mirando las tendencias más de conjunto, no puede haber ningún pronóstico de mediano plazo que augure estabilidad: ¡se vienen grandes enfrentamientos de clase donde la izquierda tiene un enorme papel que cumplir! ¡Para ese escenario debemos prepararnos!

Es verdad que el peronismo en sus distintas variantes y la burocracia sindical de todos los colores, siguen monopolizando la dirección y representación de los principales sectores de los trabajadores, los principales sindicatos y centrales nacionales, y el grueso de la votación en las elecciones.

Es un hecho que el rol estabilizador que históricamente ha cumplido la burocracia sindical, se ha visto nuevamente confirmado en la última década. Moyano en persona se ha dedicado a cumplir este rol de contención en los momentos más delicados impidiendo una irrupción de la clase obrera. ¡Se la han pasado administrando las medidas de fuerza de manera tal que no los desborde!

Lo que ha pasado en estos últimos meses luego del paro del 28 de agosto es ejemplificador. Frente a la posibilidad de una nueva devaluación en septiembre que podría haber cuestionado la continuidad del gobierno de Cristina, se llamaron a silencio y dejaron trascender que no convocarían un nuevo paro nacional por lo que restaba del año.

La semana pasada convocaron a un paro sectorial del transporte reclamando por un bono para fin de año y contra el impuesto al salario, esta semana amagaron con un nuevo paro y cuando Cristina les tiró un gueso rápidamente volvieron a la calma, pero en el camino dejaron en la estacada a los millones de trabajadores que cobran salarios bajos o que están en negro, solo tienen en cuenta sus intereses corporativos  y cumplen a rajatabla su siniestro rol de mediación, impidiendo que la lucha sume más trabajadores y escale a mayores enfrentamientos.

Desde esta tribuna el Nuevo MAS reafirma su compromiso de apoyar las luchas de los trabajadores y en particular la pelea por echar a la burocracia de los cuerpos de delegados y sindicatos en el camino de refundar un nuevo movimiento obrero que luche más allá de lo reivindicativo que luche por gobernar el país.

 

¡Compañeros y compañeras!

Este rol de la burocracia y el peronismo no ha impedido que la izquierda se venga fortaleciendo entre amplios sectores de vanguardia obrera, y también en otros sectores como el movimiento estudiantil, el movimiento de mujeres y los sectores populares. El millón de votos obtenidos entre el FIT y nuestro partido en las elecciones del 2013 son la expresión electoral de esto.

La izquierda ha alcanzado un predicamento que tiene la posibilidad de transformarse en histórico, en la medida que se tenga una estrategia política y constructiva correcta, orgánica, y también que se produzcan mayores enfrentamientos que agudicen la lucha entre las clases.

Ya en el acto del 1º de Mayo, organizado en común por el FIT y nuestro partido, pusimos sobre la mesa este debate, por ahora no tuvimos respuesta.

El FIT está congelado como una “cooperativa electoral” que si bien expresa un criterio de independencia de clase, desde el punto de vista político sufre un deslizamiento electoralista acentuado.

¡Este año no fueron capaces de tener una sola iniciativa como frente en el terreno de la lucha de clases! ¡Siquiera fueron capaces de posicionarse en común frente a algo tan elemental como un paro general!

Nuestro partido tuvo más reflejos para responder frente al ajuste de enero, hicimos un llamado a actuar de inmediato, llamado que nunca respondieron.

Renguearon por detrás de los acontecimientos sin lograr ponerse de acuerdo, siquiera, en una convocatoria unificada de todas las fuerzas del clasismo, a un encuentro nacional para que durísimas luchas como Gestamp y Lear no quedaran aisladas.

Tenemos con los compañeros otro debate: tiene que ver con el desafío de la construcción orgánica de nuestras organizaciones; los puestos parlamentarios, los 5 minutos de fama que te da estar en los medios, crean inmensas presiones que hay que combatir para no caer en una deriva electoralista y superficial en la acción política.

Si bien a este respecto puede haber matices entre los integrantes del FIT, una agenda demasiado atada a los “proyectos de ley”, una autoproclamación ombliguista que se aparta de la realidad, una valoración desproporcionada de las propias fuerzas, caracterizan a todos los integrantes del FIT, y lo mellan en tanto herramienta útil a la lucha de clases cotidiana.

 

Compañeros y compañeras

El Nuevo MAS defiende otro método: la política revolucionaria se basa en criterios principistas y no en especulaciones electoralistas.

Nuestro partido no es sectario y tiene los pies sobre la tierra y no cabe ninguna duda entre la vanguardia clasista que el Nuevo MAS tiene miras más altas que las fuerzas del FIT.

Por lo dicho y en la medida que el FIT persiste como un frente de independencia de clase, queremos hacerles a los compañeros un claro llamado para participar juntos en las próximas elecciones, así como también al compañero Luís Zamora y la organización donde milita Autodeterminación y Libertad.

Se viene dando el hecho histórico que la izquierda clasista, la izquierda revolucionaria, viene ganándole las votaciones a la llamada “centroizquierda” que pregona no la independencia de clase sino la colaboración con los patrones.

¡Con la unidad entre nuestras tres fuerzas la independencia de clase se fortalecería!

 

¡Compañeros y compañeras!

Acabamos de lograr la enorme conquista de nuestra legalidad nacional. ¡Con esta herramienta en la mano es que hacemos este llamado para dar una respuesta socialista unificada en las próximas elecciones!

No nos hacemos demasiadas ilusiones. El FIT cree tener la “vaca atada”. Creen que digan lo que digan o hagan lo que hagan, los votos les van a “llover” igual. Es muy probable que la izquierda tenga una importante votación en el 2015. Pero en todo caso, nunca habría que perder de vista que los votos van y vienen. El FIT se maneja con un criterio sin principios que hace uso de la legislación electoral proscriptiva para no sentarse a discutir.

Insistimos: ¡para el Nuevo MAS la política revolucionaria se basa en criterios principistas, no en especulaciones electoralistas!

Con el mismo criterio también estamos llamando al compañero Luís Zamora a que dé un paso adelante. El compañero se ha mantenido como un dirigente independiente que no ha realizado acuerdos con ningún sector burgués y burocrático. Además, sigue siendo una figura reconocida entre amplios sectores. Y esto lo decimos sinceramente, sin especulación ni adulación. Desde esta tribuna llamamos al FIT y Luis Zamora a abrir un diálogo sobre nuestra propuesta.

Pero también extendemos ese llamado a los miles de compañeros y compañeras simpatizantes de la izquierda, que acuerden con la necesidad de presentar una respuesta socialista unificada en las elecciones, a sumarse a esta pelea junto al Nuevo MAS.

 

¡Compañeros y compañeras!

Se avecina una enorme campaña electoral para nuestro partido, un enorme desafío. Nuestro primer eje será poner la campaña electoral al servicio de las luchas obreras, estudiantiles y de las mujeres que se desarrollen. Pero además, pretendemos utilizar la legalidad nacional conquistada y la candidatura presidencial, mi candidatura presidencial, para llevar la política de nuestro partido hasta el último rincón del país.

Se trata de tareas políticas y constructivas de amplio alcance. Vamos a participar de las elecciones con un perfil que recoja algunos aspectos de nuestra campaña del 2013 formulando las reivindicaciones más sentidas de los explotados y oprimidos, y pugnando para que tengan voz en el Congreso.

Nuestro partido aspira a hacer una gran elección, vamos a dar una enorme batalla democrática para pasar las PASO proscriptivas de este régimen de la democracia de ricos, y consagrar representaciones nacionales en el Congreso en octubre.

Nuestro mensaje electoral colocará al frente el planteo que hace falta una alternativa socialista, una alternativa que plantee, estratégicamente, la necesidad que los trabajadores gobiernen en nuestro país.

Esto también supone una polémica con el FIT, que se ha negado a tener un discurso de este tipo. Consideran que sólo votándolos a ellos estaría resuelto el problema de la conciencia de los trabajadores.

El perfil del FIT, estrechamente reivindicativo, no colabora con la que debe ser una de nuestras principales tareas: ¡dar una lucha a brazo partido para la elevación de la conciencia política y socialista de nuestra clase!

¡De ahí que en esta campaña presidencial vamos a batallar por colocar la alternativa del socialismo en la agenda de amplios sectores de los trabajadores!

 

¡Compañeros y compañeras!

Se nos plantean tareas constructivas de enorme importancia, históricas para nosotros, alrededor de esta campaña electoral: ¡dar pasos en transformar nuestra organización en un gran partido nacional!

Y también tenemos otras tareas como profundizar la estructuración obrera de nuestro partido, la lucha que se viene en el neumático, tareas a las que convocamos a nuestra militancia a redoblar esfuerzos para hacer del Nuevo MAS una gran organización revolucionaria que aspire a ser parte de la historia de lucha nuestra clase.

En pocos días se cumplen 15 años del primer gran paso que dimos para construir una nueva organización revolucionaria en la argentina, la verdad nadie daba 2 pesos por nosotros, pero hoy podemos decir con mucho orgullo Tarea Cumplida, acá está de pie el Nuevo MAS, con esta nueva generación partidaria que no cabe dudas cada día que pasa afianza y consolida su compromiso militante con la revolución socialista.

No es para dar manija compañeros, pero no tengo dudas que el empuje demostrado en este acto transformará al Nuevo MAS en uno de los más importantes partidos de la izquierda argentina.

Para terminar compañeros: quedan todos avisados desde el 1º de enero el Nuevo MAS sale a las calles con su militancia, con sus candidatos y sus propuestas a dar una batalla política por una alternativa socialista unificada para las elecciones del 2015.

 

¡Manos a la obra compañeros!

¡Viva la clase obrera mundial y argentina!

¡Viva el Nuevo MAS y su joven militancia!

¡Viva la corriente Socialismo o Barbarie Internacional!

 

¡Muchas gracias compañeros y compañeras!

 

Dejanos tu comentario!