Compartir el post "Con las banderas socialistas de Carlos Fuentealba"
Los trabajadores tenemos que conquistar, tanto en las elecciones como en los lugares de trabajo, nuestras propias formas de organización política y sindical, independiente de los patrones, para poder luchar por nuestras necesidades. Hay que echar a los sindicalistas tradicionales que están atornillados en los sindicatos. En Neuquén el caso más emblemático es el de Guillermo Pereyra, vitalicio secretario general del sindicato de petróleo y gas privado. El mismo que supuestamente tiene que defender a los trabajadores es del partido de gobierno, el MPN, que negocia las mejores condiciones de inversión para las petroleras: eso es teniendo bajo control a los obreros y haciéndonos pagar el ajuste, diciendo que hay que agradecer por el trabajo y callarse la boca.
Son los Pignanelli, que junto con el gobierno de Cristina y Scioli en provincia de Buenos Aires atacaron a los trabajadores de Gestamp cuando tomaron el puente grúa en defensa de los puestos de trabajo. O en Lear, haciendo asambleas truchas con el ministerio de trabajo para destituir a los delegados independientes. Como la persecución a nuestro compañero Maxi Cisneros de Fierestone, despedido por hablar en una asamblea y quien fue reicorporado con la lucha. Porque cuando los trabajadores nos organizamos nos atacan, como en Cerámica Neuquén que vienen peleando en defensa de los puestos de trabajo. ¡Hay que estatizar toda empresa que suspenda y despida!
Desde la Lista Gris Carlos Fuentealba participamos en la experiencia del FURA en ATEN, un frente antiburocrático para que los trabajadores decidamos en las asambleas con independencia de los que gobiernan que son nuestros patrones. Lamentablemente por la mezquindad de sectores de la izquierda se perdió la conducción del gremio a manos del Kirchnerismo, que quiere apropiarse de la figura de Carlos Fuentealba para posar de “luchadores” cuando fue el propio kirchnerismo el que reprimió luchas obreras como en las que asesinaron a Fuentealba. Y fueron esos dirigentes kirchneristas los que entregaron la pelea por justicia por Carlos en manos de los jueces y fiscales del 18F en vez de confiar en la movilización y la propia fuerza de los trabajadores.
Es por eso que desde el Nuevo MAS seguimos levantando bien en alto las banderas de nuestro compañero de militancia, Carlos Fuentealba, y exigimos que se haga justicia, que todos los responsables políticos como Sobisch vayan presos como tiene que ser.
Por la libertad sindical.
Por la prohibición de los despidos y suspensiones.
Eliminación del impuesto al salario.
Que el ajuste lo paguen los capitalistas.