Los docentes de Tigre tienen que ganar

A raíz de que el gobierno decidió no pagarles el salario, el viernes 10 de abril, los docentes de Suteba Tigre (seccional recuperada para las/os trabajadores), convocados en asamblea por su dirección, la Multicolor, ocuparon pacíficamente la Jefatura Regional del mencionado distrito.

Desde hace un tiempo, el gobierno de Cristina en complicidad con los gobiernos provinciales, viene descargando un ajuste sobre las espaldas de la/os trabajadores. El caso de Tigre, donde más de 700 maestras y profesores están sin cobrar, es una expresión de esta política de ajuste que consiste en pagar religiosamente la deuda externa, dar aumentos de salario por debajo de la inflación y…. directamente no pagar el sueldo!!!!

A partir de la lucha que están dando los docentes de Tigre nos dedicaremos a tratar de sacar las primeras enseñanzas que ya lleva varios días, por un reclamo más que justo que, no es ni más ni menos la remuneración de nuestras horas trabajadas. En particular queremos hacer referencia al debate que se generó el último día de la toma en la asamblea en relación a continuar o no las medidas de fuerza con la sola promesa del gobierno de pagar los salarios.

Scioli: ¿querés ser presidente y no pagas el sueldo a los docentes?

Durante varios días, esta pregunta recorrió escuelas, cajeros, guardapolvos cuadrille, avenidas, vías del ferrocarril Mitre, etc. Porque luego de meses sin cobrar, los docentes dijimos ¡basta! Basta de trabajar y no cobrar, basta de soportar las condiciones paupérrimas en las que esta la educación pública, basta de ser una variable de ¡¡¡ajuste!!! No obstante, sabemos que en primer lugar, Cristina es la responsable número uno, en complicidad con Scioli y la repodrida burocracia sindical de Baradel, y la dirección traidora hasta la medula del Frente Gremial: todos ellos son responsables del vaciamiento y desfinanciamiento de la escuela pública.

El gobierno de Cristina ya tiempo atrás comenzó a llevar adelante un ajuste soportando desde la devaluación de enero de 2014, los salarios a la baja, y también despidos y suspensiones. Pero los trabajadores luchamos contra estos atropellos. Un ejemplo de ello es lo que ocurrió en el Parque Industrial de Pilar, donde las trabajadoras de Kromberg dieron una dura pelea contra los despidos arbitrarios en su fábrica, luego vino la gran huelga que dimos los docentes de la provincia de Bs. As., durante 17 días. Pero sin lugar a dudas, si hay un debate que se ha vuelto a poner en discusión de manera explícita e implícita son las dos luchas históricas, en primer lugar, Gestamp (y la gesta heroica del puente grúa) y en segundo lugar, la lucha que dieron los obreros de Lear. Si bien ambas luchas se dieron en el marco del ajuste y contra la burocracia sindical del SMATA, en ambos conflictos se han empleado distintos caminos para triunfar en la lucha. Y desde el Nuevo Mas (y la Lista Gris Carlos Fuentealba) hemos sacado enseñanzas, lecciones y conclusiones de ambas luchas.

Experiencia y radicalización de la lucha

Desde la gran lucha histórica de los 17 días, de amplias jornadas en Tigre, la docencia se ha hecho notar con un gran caudal de compañeras/os dispuestos a luchar por un salario digno y por las reivindicaciones más sentidas entre amplios sectores de docentes. Esto se vio claramente en las asambleas extraordinarias que se llamaban desde el Suteba Multicolor, como así también en las asambleas convocadas por la burocracia Celeste. En ambas fuimos cientos de compañer@s las que apostábamos por la lucha consecuente que llevábamos adelante desde la Multicolor.

Ya en la paritaria de este año la lucha no alcanzó la misma profundidad que en 2014: las asambleas y movilizaciones más chicas y el paro más corto. Sin embargo, la experiencia de la huelga histórica del año pasado nos sirvió para acumular un nivel de organización mucho mayor que el que teníamos antes, incorporando a la vida política y sindical a muchos más docentes con un espíritu combativo mayor. Este mayor grado de conciencia política y de organización es el que explica la lucha radicalizada de la toma de la Jefatura Regional, el gran acatamiento del paro distrital del 16 y 17 de abril en Tigre; así como el corte de la vías del tren Mitre o la misma Panamericana. Un gran ejemplo para toda la docencia y un camino a seguir cuando se trate de endurecer la lucha.

La decisión de realizar acciones de lucha radicales vino luego de que nos cansáramos de peticionar en las escuelas nuestras altas y contralores, de ir una y mil veces a la Secretaria de Asuntos Docentes (SAD) y a La Plata. Y el día 8 de este mes, cuando fuimos a cobrar, nos desayunamos con que nuevamente no habían depositado nuestro salario. Ante el degaste y las presiones que generan no tener dinero ni para la SUBE, luego de dejar todo en las aulas, se llegó a tal nivel de bronca e indignación que los docentes optaron por radicalizar sus métodos de lucha, teniendo en cuenta que por la vía “legal y administrativa” no habían más que respuestas de que “quizás cobres el mes siguiente”.

Ante estas situaciones y cansadas/os de estos chamuyos se llegó a utilizar una medida más contundente, que no es más que una táctica histórica ante el golpe de las patronales: la toma. Porque cuando se trata de un ataque, como el despido de compañeros y el no cobro del salario, de lo que se trata es de estar a la altura de las circunstancias y plantear una acción de lucha a esa altura. Los trabajadores apelan a estas medidas cuando no les queda otra alternativa, radicalizando sus métodos de lucha, ya sea ocupando una fábrica o un lugar de trabajo. Está claro que la toma no es una táctica mágica que nos solucionara el problema, sino que tiene que estar en función de hacer que los trabajadores podamos actuar para torcer el brazo al gobierno a nuestro favor. Como vimos, la toma de la Jefatura Regional sirvió como punto de apoyo para que el Subsecretario Administrativo Gustavo Sendra del Ministerio de Trabajo se bajara a negociar. Obviamente que pidiéndonos que desactiváramos las medidas, por eso desde la Lista Gris Carlos Fuentealba mocionamos no levantar las medidas de lucha que habíamos decidido en asamblea (como la continuidad de la toma), ya que entendíamos en que eran la única garantía para que depositen efectivamente nuestro sueldo. Estas medidas iban desde hacer un festival, hasta volantear en la rotonda de Tigre y movilizar a la casa de Scioli en Villa la Ñata. Pero el viernes, es decir, un día después, decidieron levantar todas las medidas de lucha con el argumento de que estaba el papel firmado, que no depositaban ninguna confianza, pero que era mejor descansar, volver con nuestras familias y si no se depositaban los salarios adeudados, el martes volver con todo a la lucha.

Desde la Lista Gris Carlos Fuentealba mocionamos no levantar las medidas ya que esto implícitamente significaba llamar a confiar en los papelitos de colores que nos ofrecía el gobierno por más adorno que se le quisiera poner y que levantar las medidas iba a significar un retroceso ante la posibilidad de que el gobierno no pagara.

Un pequeño balance de la asamblea del 17

Así llegamos al martes 21 (fecha en la que se deberían haber depositado los sueldos adeudados según el gobierno) y empezamos a enterarnos que lamentablemente el gobierno no cumplió con su compromiso de liquidar los sueldos adeudados. Esto demostró que la propuesta de la Lista Gris de no levantar ni una sola de las medidas, ya que no debíamos depositar ni un gramo de confianza en las promesas del gobierno, era correcta.

Nuestro planteo de continuar y no levantar la medida, no surgía de tener la bola de cristal, ni de cuestiones metafísicas, sino que es producto de extensos balances que ha hecho nuestra organización de otras luchas de los trabajadores, y de la total desconfianza en una “justicia” que dirime a favor de los ricos. Desconfianza surgida del repaso de la historia del movimiento obrero y de las recientes experiencias de Gestamp y Lear. Porque hacemos balance, no nos olvidamos que luego de la gesta del puente grúa y la toma por parte de un sector de trabajadores de Gestamp, el ministerio de trabajo con la firma de puño y letra de Daniel Scioli se comprometía a que el lunes los despedidos ingresarían a su puesto de trabajo y luego deshizo la conciliación obligatoria que el mismo dictó no dejando entrar a los trabajadores, quienes hasta hoy día siguen despedidos. Es decir: la palabra o un papel firmado del gobierno NO es garantía de nada, la única garantía es nuestra lucha.

Desde la Lista Gris Carlos Fuentealba propusimos el no levantamiento de la toma porque, como mencionamos más arriba, para nosotros es un punto de apoyo a la lucha, y permite continuar con la agenda que teníamos planteada haciendo el esfuerzo de ser mas docentes luchando mientras se seguía rodeando de solidaridad el conflicto. El riesgo que se corre cuando se retrotraen las medidas de fuerza es que la lucha se “desinfle” y luego cueste mucho volver a poner en pie a todo un sector de la docencia. Repetimos: el viernes 17 había que continuar con todas las medidas de fuerza votadas y sólo cantar victoria y salir a hablar de “triunfo” cuando los docentes tengan el sueldo depositado en el cajero… no antes! (como se acostumbró a hacer el PTS-La Marrón).

La lucha continua

Pese a los errores políticos de la conducción multicolor y a la traición de la Celeste de Baradel, la lucha de los docentes de Tigre continúa. El día martes luego de corroborarse el no cobro de muchos docentes se realizó una asamblea donde se votaron acciones como la recorrida de escuelas, el paro distrital los días jueves y viernes (23 y 24 de abril) y el corte de la panamericana el día jueves para visibilizar el conflicto. Los compañeros de la Fuentealba planteamos también la necesidad de exigirle a la burocracia de Baradel un paro provincial en apoyo a todos los docentes bonaerenses que no cobran. La masificación de la lucha, apoyada sobre las acciones que vayamos tomando en el camino, es la llave para nuestro triunfo.

• Ni un solo docente sin cobrar su salario.
• Ni un gramo de confianza en el gobierno.
• Exijamos a la Celeste un paro provincial para que triunfe la lucha
• Por una gran movilización a Suteba central para exigirle a Baradel un plan de lucha.

Lista Gris Carlos Fuentealba

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