La marcha fue encabezada por familiares de víctimas de femicidios de la provincia, como por ejemplo la mamá de Romina Ríos, la adolescente asesinada por un policía. También participaron de la marcha familiares de Peli Mercado, víctima de las redes de trata, desaparecida en 2005.

Esta marcha, al igual que toda marcha multitudinaria, contó con una participación multitudinaria, a la cual ningún sector del arco político se pudo ausentar. Eso género que hasta los sectores más reaccionarios de la sociedad riojana se vieran obligados a hacerse presente. A esto hay que sumarle que estamos en periodo de campaña lo que hace despertar falsas “sensibilidades” en los dirigentes de los partidos patronales.

Actúan fingiendo ignorar el hecho de que son ellos quienes tuvieron, en todos estos años, el poder para modificar esta situación que viene de hace rato. No faltó la maniobra demagoga de su parte saliendo a «mostrar el apoyo a la iniciativa», acompañada de una cirquera firma de una «carta compromiso en contra de la violencia de género» cuando el mismo gobernador fue el responsable de haber aprobado una ley en 2006 que habilita a los prostíbulos.

Juan Yacante, quien continuar movilizándose y sigue sin tener noticias acerca de su nieta, decidió acompañar la marcha y repudio públicamente el silencio y la complicidad del poder político y judicial.

Ante esto, desde Las Rojas expresamos nuestra indignación al ver a los funcionarios de estos sectores participando y mostrando su «sensibilidad» ante los casos y la causa cuando ellos mismos son cómplices de la condición en que se encuentran hoy las mujeres.

Ni hablar de la participación de la Iglesia en la marcha y su discurso contra los derechos de las mujeres y de su «reivindicación» de la mujer esencialmente como madre y esposa abnegada, nunca como sujeto libre y de derecho

En este alza de los reclamos contra el machismo, salimos a gritar a los cuatro vientos que a la opresión y a la violencia ya no la vamos a seguir soportando, ni tampoco que sus autores y reproductores se vistan de corderos en épocas de elecciones para salir en la foto.

Saludamos a las miles de mujeres y a los hombres que salieron a las calles para hacer oír su grito. Pero también alertamos sobre los dobles discursos de los cómplices de esta opresión. Repudiamos a la Iglesia y su oscurantismo reaccionario que salió con carteles gigantes que decían «si a la vida, no al aborto».

Nosotras desde el Nuevo MAS y Las Rojas dimos nuestro discurso saludando a la movilización y haciendo hincapié en que la herramienta para lograr imponer que se tomen y ejecuten medidas concretas es la movilización en las calles, como lo demostró esta movilización masiva en todo el país. Para asegurarnos la aplicabilidad de leyes, que concedan los derechos y libertades que exigimos y merecemos las mujeres, necesitamos poner manos a la obra, salir y luchar. La lucha del movimiento de mujeres es nuestra única garantía de que se efectivicen las políticas para resolver la situación de emergencia.

La organización independiente y combativa en todos los ámbitos (laboral, escolar, académico, barrial) es la verdadera salida sabiendo que ni esta justicia patriarcal ni estos funcionarios estatales van a abogar por transformar la situación.

Josefina

Las Rojas La Rioja

Dejanos tu comentario!