Compartir el post "Por una Córdoba al servicio de los trabajadores, las mujeres y la juventud"
Schiaretti, los K y Aguad gobiernan para los empresarios, los sojeros y las multinacionales
Las elecciones provinciales han sido convocadas para el 5 de julio. El PJ de De la Sota y Schiaretti, los K con Accastello a la cabeza y la alianza PRO/UCR/Juez que candidatea a Aguad tratarán de monopolizar la elección mostrándose como si fueran diferentes entre sí. Desde el Nuevo MAS creemos que, más allá de los matices, todos representan los intereses de unos pocos, los empresarios que se enriquecen a costa del esfuerzo de la mayoría de la provincia: los trabajadores.
Córdoba es la segunda provincia más importante del país y ha sido durante años terreno de jugosos y multimillonarios negocios para unos pocos. Sólo el año pasado, la provincia exportó soja por más de 4 mil millones de dólares. Multimillonarias son también las enormes ganancias de las multinacionales automotrices. La situación es muy diferente para los trabajadores. Luego de 12 años de kirchnerismo, luego de una década de empresarios cada vez más ricos, nos están haciendo pagar su crisis. En la provincia y todo el país, Massa, Macri y Scioli preparan un ajuste a las condiciones de vida de los trabajadores con salarios por debajo de la inflación, despidos y suspensiones. Y ésta política será acompañada por Schiaretti, Aguad o Accastello. Ninguno de ellos tiene en su agenda las reivindicaciones de los trabajadores, las mujeres y la juventud.
Como si fuera poco, ahora el delasotismo reformó la ley electoral provincial permitiendo que los aportes «privados» a las campañas electorales sean 5 veces los aportes del Estado. Es decir: abrieron la canilla para que los empresarios les finan-cien sus campañas con más y más millones. De esta forma, los ricos se aseguran que el próximo gobierno les «devuelva el favor» gobernando para que ellos sigan ganando también, más y más millones. Hay que romper con este círculo vicioso. Desde el Nuevo MAS queremos proponerte algo radicalmente diferente, queremos construir junto a vos una provincia de los de abajo: una Córdoba al servicio de los trabajadores, las mujeres y la juventud.
1 Aumento salarial de emergencia. Terminemos con la precarización laboral. Eliminación del impuesto al salario.
La canasta básica familiar, el monto básico para que una familia llegue con lo mínimo indispensable a fin de mes, ronda los 15 mil pesos mientras el salario promedio es de 7 mil. Mientras tanto, a los pocos trabajadores que tienen un salario por encima del promedio, el gobierno les mete la mano en el bolsillo con el impuesto al salario. Proponemos que el salario efectivo promedio sea igual o mayor a la canasta familiar, con un aumento salarial general de emergencia. La inestabilidad laboral es sufrida por miles de trabajadores de las empresas tercerizadas. Con el fraude de las «consultoras», las empresas se ahorran efectivizar a miles más. Hay que terminar con la precarización laboral y pasar a planta permanente a todos los trabajadores. Terminemos con el fraude de las consultoras y el trabajo en negro. Recuperemos el 82% móvil para los jubilados, derogación de la ley 10078. No al Impuesto al salario.
El año pasado se perdieron más de 500 mil puestos de trabajo en todo el país, producto de despidos abiertos o encubiertos («retiros voluntarios»). Luego de años de llevarse millones de pesos producto de nuestro trabajo, ahora los empresarios pretenden que nosotros paguemos las consecuencias de su crisis y amenazan con dejarnos sin trabajo ante la más mínima reducción de sus ganancias. Proponemos la prohibición de despidos y suspensiones. Estatización bajo control obrero de toda empresa que cierre o despida.
También queremos impulsar la democracia sindical. Los dirigentes sindicales tradicionales negocian a espaldas de las bases aumentos de salario miserables y dejan pasar los despidos y las suspensiones. Mientras tanto, los gobiernos persiguen y reprimen con la policía a los que se organizan, como fue con la lucha de los obreros de Valeo, Weatherford, los docentes y los trabajadores de la salud en nuestra provincia. Basta de reprimir a los que luchan. Que los trabajadores se organicen como ellos quieran. Acabemos con los dirigentes atornillados a los sillones de los sindicatos durante décadas. Que se le abra paso a la nueva generación obrera luchadora.