Compartir el post "Elecciones en la UBA – Una disputa para que el movimiento estudiantil enfrente el ajuste que viene"
Al cierre de esta edición están teniendo lugar las elecciones en las trece facultades de la UBA para centros de estudiantes y para renovar los consejeros estudiantiles en los órganos de cogobierno. Desde ¡Ya Basta!-Nuevo MAS y Las Rojas nos presentamos en cinco de estas elecciones (Sociales, Filosofía y Letras, Medicina, Psicología y Exactas). Desarrollaremos a continuación qué está en juego esta semana.
Una pelea por la independencia política
El contexto más general en el cual transcurren los comicios está fuertemente atravesado por el año electoral y el fin de ciclo. Como es sabido, la Universidad (y la caja que maneja) son un terreno de disputa entre las camarillas capitalistas por un lado y el movimiento estudiantil por el otro.
Frente a esta situación, e incluso teniendo en cuenta las diferencias que los separan a la hora de repartirse la UBA a pesar de que la gobiernen de conjunto, la oposición patronal (principalmente Franja Morada-Nuevo Espacio) y el kirchnerismo intentan avanzar en el claustro estudiantil, históricamente el más combativo. Por un lado Franja Morada, con buena salud a pesar de los escándalos de corrupción que le explotaron este año, intenta ampliar el margen en las facultades donde ya es la fuerza mayoritaria (como Medicina y Económicas) y avanzar en aquellas donde ya tiene una importante presencia (Psicología y Derecho). Su objetivo es claro: son los principales impulsores de la privatización y el recorte de la mano de su rector Barbieri.
Por otro lado el kirchnerismo busca “reinstalarse” en la UBA luego de años de dificultades para avanzar. Recordemos que jamás pudo alzarse con la conducción de un solo centro de estudiantes, ni siquiera en el 2011, cuando obtenía más de la mitad de los votos a nivel nacional. En esta oportunidad su campaña tiene poco de ideológico e intentan desacoplarse de la candidatura de Scioli, haciendo campañas estrechamente sindicales y dirigidas a una crítica vacía a los “servicios” que otorgan los centros de estudiantes.
Lo que debe quedar claro para el movimiento estudiantil es que estos intentos de avanzar por parte de Franja Morada y el kirchnerismo no se dan en el aire. Todos tienen claro que a partir del año que viene el gobierno intentará hacer pasar un duro ajuste sobre las espaldas de los trabajadores y los sectores populares del cual la educación pública no estará exenta. Intentan fortalecer sus posiciones para cerrar filas en esa dirección en las facultades y en la Federación Universitaria, y es por esto que evitan decir una letra sobre la situación que se viene.
Como dato relevante, es importante recordar que el espacio del “reformismo de izquierda” (principalmente expresado por La Mella), salvo excepciones, presenta un desfondamiento que podría marcar la tónica de lo que se viene. La expresión más clara es que su principal aliado en el 2014, el “kirchnerismo light” de Seamos Libres (Pablo Ferreyra) se pasó con armas y bagajes a las listas de La Cámpora.
A continuación abordaremos la situación en cada una de las facultades donde intervenimos para desarrollar los aspectos más específicos de cada elección.
Sociales: la madre de todas las batallas
Necesariamente la discusión debe empezar por Sociales por dos motivos. El primero tiene que ver con algo ya conocido: esta facultad es el punto de referencia del activismo de toda la UBA debido a su politización y al “enganche” que tiene, con menos mediaciones, con la realidad nacional. Además de esto, es (junto con la facultad de Arquitectura) la que se encuentra más seriamente comprometida frente a la posibilidad de un avance de las camarillas (en este caso el kirchnerismo).
Es que, viendo la tarea que tienen por delante, este año La Cámpora y los sectores más orgánicos del gobierno han constituido un frente con la UES, agrupación histórica de la facultad que responde a una facción del PJ y que ha acompañado los gobiernos de Menem, Duhalde, Néstor y Cristina. El último año, por disputas de aparato, ambos grupos se presentaron divididos, conquistando la UES un importante 20% de los votos (La Izquierda al Frente, de la cual formamos parte, rondó el 23%).
De esta forma, se llega a una elección inevitablemente polarizada y con una discusión eminentemente política: si el CECSo continuará conducido por la izquierda, impulsando las luchas y formando parte de la pelea más general contra el ajuste, o si se convertirá en una secretaría de la gestión para continuar aplicando el recorte a las carreras y el desfinanciamiento que se expresa en la crisis de infraestructura.
En vista de esta polarización La Izquierda al Frente también se ha ampliado incorporando a otras expresiones independientes (principalmente CAUCE).
Desde el Nuevo MAS apostamos a hacer avanzar esta alternativa independiente que nos tiene como actores de primera hora en la vicepresidencia del centro.
Filosofía, Medicina, Psicología y Exactas: estabilidad con posibles reacomodamientos
En la Facultad de Filosofía y Letras la disputa, sin dejar de ser importante, se encuentra en un punto menos álgido. Es que, tras el derrumbe de La Mella (que pasó de conducir el centro a salir tercera “cómoda”) el kirchnerismo no supo ocupar ese espacio. Es por eso que se avizora un panorama menos dramático que en el caso de Sociales.
Desde nuestra organización venimos dando importantes pasos en nuestro afianzamiento en esta facultad. Es por ello que nos ubicamos como una indiscutida tercera fuerza (con la primera vicepresidencia) dentro de un frente conformado junto al FIT y otras organizaciones netamente estudiantiles, y buscamos utilizar estas elecciones como una tribuna que nos permita avanzar en nuestro desarrollo regional.
En Medicina se espera un triunfo con comodidad de Nuevo Espacio-Franja Morada, aunque resta evaluar cuánto impacto tuvieron los escándalos que este grupo del rectorado atravesó a lo largo del año. El caso más llamativo fue el del Hospital de Clínicas que tuvo como principales afectados a Giusti (ex decano de Económicas) y Yacobitti (dirigente de la UCR y Secretario de Hacienda de la UBA). Allí nos jugamos a avanzar en una facultad con enormes potencialidades para nuestra organización, en la cual estudian varias decenas de miles de estudiantes, con la consigna clara de defender la educación y la salud públicas y con el contenido específico de la lucha por la salud sexual y reproductiva de las mujeres. Nuestra agrupación, RH Combativo, integra El Frente y tiene la perspectiva de ingresar en la Comisión Directiva del CECIM para consolidar nuestra ubicación.
En Psicología, el desfondamiento de las mediaciones electorales (al cual ya nos referimos antes) tiene su expresión en el probable debilitamiento de El Impulso (SUR, FER y La Mella), frente del cual ha salido el MST por una discusión de cargos. El EDI (Nuevo Espacio) intenta avanzar de la mano de la decana Cervone, lo cual plantea un importante desafío al movimiento estudiantil frente a una de las gestiones más privatistas de la UBA. Frente a la posibilidad de este avance de las autoridades y para tener otro piso para dar esta pelea, repetimos la experiencia de La Izquierda al Frente (junto al PO y el PTS), experiencia que nos tiene como parte de la conducción del CEP en la Secretaría General. Asimismo, queda planteada como tarea fortalecer nuestra ubicación y nuestras potencialidades en una facultad atravesada, por su composición, por las discusiones específicas del movimiento de mujeres.
En Exactas la situación tiene sus semejanzas y también sus diferencias con el panorama más general. Es que esta facultad es menos permeable a la discusión política global, razón por la cual La Mella preside el centro de estudiantes con campañas que proponen, básicamente, crear una burbuja y que sólo se discutan los problemas más específicos de la facultad. Esto presenta dos limitaciones: por una parte, es necesario que el movimiento estudiantil forme parte de las luchas de los sectores populares para fortalecerlas. Además, frente al panorama de ajuste que se abre ninguna reivindicación, por más “sindical” que parezca, podrá ser resuelta mirando nuestro propio ombligo. Lo más probable es que La Mella retenga la conducción del centro, pero se encuentra en discusión qué espacio le toca ocupar al kirchnerismo (que también ha sumado a nuevas organizaciones y cuenta con el aparato y el financiamiento explícito de la gestión de la facultad, que llega al punto de propagandizar las “iniciativas” de La Cámpora mediante los canales institucionales). Los compañeros y compañeras del Nuevo MAS también formamos parte aquí de La Izquierda al Frente (como principales protagonistas) y, sobre la base de la pelea planteada, nos jugamos a mantener nuestra representación en la FUBA y avanzar en nuestra implantación en la facultad.
Vamos por un movimiento estudiantil que enfrente el ajuste junto a los trabajadores
Al servicio de qué intereses está la Universidad es lo que está en juego en estas elecciones. Mientras las camarillas de profesores, con las autoridades a la cabeza, buscan repartirse la UBA entre kirchneristas y radicales, el movimiento estudiantil (con el Nuevo MAS como protagonista) plantea que esté al servicio de las necesidades y las luchas de los trabajadores, las mujeres y la juventud. Y, en primer lugar, que sea un actor en la lucha contra el ajuste que preparan Macri y Scioli para los próximos meses.
Es por ello que un punto fundamental de nuestra agitación, lejos de cualquier oportunismo, tiene que ver con la democratización de los órganos de cogobierno de la UBA con mayoría estudiantil, claustro único docente, voz y voto para los no docentes y elección directa de las autoridades, es decir, el histórico programa por la democratización del cual muchos han defeccionado y que nosotros levantamos con orgullo.
Te invitamos a que te sumes a ¡Ya Basta!-Nuevo MAS para profundizar esta lucha y darle extensión en toda la UBA y las demás universidades del país a esta alternativa que viene creciendo.
Marcos Duch