Compartir el post "Un fallo de un ex policía no puede decidir la lucha docente"
SCIOLI-DE LUCIA-TERRIER JUEGAN TODOS EN EL MISMO EQUIPO
¡NO AL AMPARO CONTRA LA LUCHA DE LOS DOCENTES!
La histórica movilización en La Plata del miércoles pasado colocó a la lucha docente en una nueva situación.
El decretazo, las amenazas de descuento, el proyecto de Mariotto de declarar a la educación servicio esencial y las provocaciones de Nora De Lucía (la misma que en el año 2012 hizo detener a los compañeros de ATE Educación) tuvieron una respuesta a la altura de las circunstancias de la base docente.
Contando con la inestimable ayuda de los medios masivos -hasta ayer opositores- que salieron a demonizar la lucha docente tratando de instalar en la sociedad su falsa preocupación por “preservar los derechos de los niños” y conscientes de que la lucha, de profundizarse y triunfar, hiere de muerte al ajuste K, Scioli se decidió por una nueva opción: habiendo fracasado el intento intimidatorio, ahora juega la carta legal.
Es así que Bonicatto, “Defensor del Pueblo” bonaerense, también mediador trucho en el conflicto salarial de los trabajadores judiciales del 2012, presentó un recurso de amparo, ya que entiende “que el derecho a la educación de los niños está por encima del de huelga”. O sea, el supuesto mediador imparcial lleva adelante la política del gobierno.
No es de extrañar, teniendo en cuenta que Bonicatto fue diputado menemista y luego kirchnerista. Una verdadera farsa.
Los amparos, en teoría, se asignan por sorteo. Esta vez Scioli ha tenido la “fortuna” que recayó en el Juzgado Contencioso Administrativo Nº 3 de La Plata a cargo de Francisco Terrier, juez con historial llamativo.
Este juez fue recusado por un defensor oficial del Fuero de Responsabilidad Juvenil por su pasado en la policía bonaerense en la causa que investigaba la cantidad real de víctimas fatales de la inundación en La Plata del 2 de abril del 2013, entendiendo que obstruía la investigación donde se cuestionaron los registros policiales y judiciales que determinaron 57 muertos.
Además, fue el mismo juez Terrier el que hizo lugar a un amparo presentado por el policía Herrero, acusado por la desaparición de Luciano Arruga. En base a este fallo, el ministro de Seguridad Granados levantó la sanción sobre los 8 policías acusados y los repuso en sus cargos. Tampoco es de extrañar, dada la condición de ex policía de Terrier, devenido «juez de la democracia».
Advertimos a los compañeros docentes sobre el cuento de “derechos que se contraponen” y “el respeto a las instituciones”. Ni hablar sobre el cuento mayúsculo de la “justicia independiente”. Todas esas bellas frases el gobierno y la patronal se las olvidaron cuando los judiciales salimos a luchar masivamente: nos respondieron con procesamientos penales, sumarios, tareas de “inteligencia” de la policía en nuestras asambleas, filmando y fotografiando compañeros para mejor sancionarlos, algo que está prohibido expresamente por ley, y expresamente convalidado por la Suprema Corte de Justicia, como además la ocupación de los edificios judiciales por la policía y la Gendarmería.
La intransigencia que Scioli atribuye a los docentes es, en realidad, su propia intransigencia para que la paritaria docente bonaerense sea el caso testigo para todos los trabajadores con el objeto de pase el ajuste.
Advertimos también a los compañeros docentes que este mecanismo del amparo ha sido utilizado en Entre Ríos. Allí el sindicato docente, siguiendo el asesoramiento de sus abogados, resolvió acatar el fallo judicial.
Como trabajadores judiciales sabemos del contenido político de numerosos fallos. Este no será la excepción, por lo que la respuesta no es tema excluyente de abogados, sino principalmente de los trabajadores.
La sorpresiva preocupación del gobierno por garantizar el derecho a la educación mediante la acción de amparo y declararlo servicio esencial vía proyecto de ley de Mariotto es absolutamente falsa. Las condiciones de los establecimientos educativos son cada vez peores, los salarios de los docentes son de los peores del país, como los de los judiciales y estatales, y los discursos oficiales no han hecho otra cosa que denigrar el guardapolvo y la dignidad de los trabajadores de la educación.
¡¡VIVA LA LUCHA DOCENTE!!
UNIDAD DE LOS TRABAJADORES EN LA CALLE PARA ENFRENTAR EL AJUSTE K