Por Marisa Victoria, Prensa Socialista 149
En un pub de Nueva York conocido como StonewallInn se reunían trans, gays, lesbianas y todo tipo de personas marginalizadas por la sociedad patriarcal y capitalista que, tras años de soportar redadas y arrestos por parte de la policía, se levantaron para impedir el ingreso de la fuerza policial. Esto desencadenó una serie de protestas en junio de 1969, las cuales fueron creciendo y acercando a más manifestantes, quienes levantaron barricadas y se auto organizaron durante días para exigir un alto a la brutalidad policial, básicamente demandando su derecho a existir sin ningún tipo de represión por su orientación sexual.
Aunque a casi 50 años de este evento histórico todavía hay discriminación, opresión y exclusión para la comunidad LGBTI, sin duda hay avances. En muchos países hay leyes que reconocen el matrimonio igualitario y en otros (menos) existe el derecho a la autodeterminación de la identidad de género.
Pero lo más importante de reconocer es que cada avance se ha producido como producto de una sostenida batalla. Desde Stonewall la comunidad LGBTI ha luchado y hemos logrado conquistar ciertos derechos. Pero la lucha no para, nada nos han regalado y nada nos van a regalar.