Brasil:
importante reunión obrera y juvenil
Se
realizó el Encuentro Nacional Contra las Reformas
Práxis
(corriente marxista revolucionaria del PSOL)
El domingo 25 de marzo se reunió en
San Pablo el Encuentro
Nacional Contra las Reformas; es decir, contra las
medidas anunciados por Lula contra la clase trabajadora y la
juventud. Concurrieron más
de 5.000 delegados de 19 estados. Este fue un evento
trascendental, tanto por la amplitud de las fuerzas políticas
y movimientos sociales que asistieron como por el hecho de
que podría ser el primer paso de una respuesta masiva y
unificada a la política antiobrera y antipopular del
gobierno petista, totalmente al servicio del gran capital. A
esta asamblea, los compañeros de Práxis
(corriente marxista revolucionaria del PSOL) llevaron
las posiciones expresadas en la siguiente declaración.
Unir a los trabajadores y la juventud
contra las reformas de Lula, el PT y la CUT
El
gobierno de Lula, el PT y la CUT tratan de asestar otro duro
golpe a la clase trabajadora y a la juventud de nuestro país.
Con el pretexto de que Brasil necesita crecer, el gobierno,
con la ayuda de la burocracia de la CUT []
y la UNE []
prepara una serie de reformas: la del sistema de retiro
(jubilaciones), la reforma laboral y la universitaria.
Con
esas reformas, el gobierno pretende engordar aún más los
bolsillos de la burguesía, mientras los trabajadores serán
castigados una vez más. El PAC (Programa de Aceleración
del Crecimiento) es un ejemplo de eso. Entre otras medidas,
reduce los presupuestos para educación y salud, y
transfiere recursos del FGTS []
para engordar las arcas de las empresas y los bancos. Y ni
hablar del pago de la deuda interna y externa, que según
datos del propio gobierno en 2007 llegará a 240.000
millones de reales.
En
este marco, la realización de este Encuentro representa un avance muy importante en la construcción de la necesaria
unidad del conjunto de las organizaciones y partidos que se
ubican en el campo del mundo del trabajo y de los
movimientos sociales, y que no se vendieron ni se venderán
al gobierno de Lula.
Hace
mucho tiempo que no conseguíamos organizar un Encuentro así,
con un número tan grande de entidades y movimientos que estén
dispuestos –sin escamotear las diferencias– a construir
una lucha unitaria: tenemos que transformar esta iniciativa
en un “puntapié” importante para las luchas que debemos
realizar este año.
Esta unidad es fruto, en primer lugar, del cambio en el
estado de ánimo que se vivimos en nuestro país.
Aunque
Brasil es el país más retrasado de América Latina desde
el punto de vista de las luchas, es innegable que ya no
vivimos en la etapa de derrotas de los años 90, ocasión en
que el neoliberalismo era la ideología dominante en toda América
Latina.
Hoy
estamos ante los primeros rayos de sol de
una nueva etapa que está surgiendo, etapa marcada por el
reinicio de las luchas, en forma molecular y desorganizada.
Son estos nuevos vientos los que, en cierta manera, han
forzado al conjunto de las direcciones de izquierda a buscar
la unidad de acción.
En
segundo lugar, la crisis del “mensalão” []
desnudó cuán
nefasta es la política de dividir para mantener pequeños
feudos. Desgraciadamente, en ese momento, las dos
principales fuerzas política de izquierda antigubernamental
–el PSTU y la mayoría del PSOL–, ambas con prácticas
autoproclamativas y sectarias,
impidieron que los trabajadores y la juventud se volviesen
un factor protagonista.
El
PSTU en aquellos momentos exigía que para hacer la unidad
había que romper con la CUT y entrar en Conlutas. Y la
mayoría del PSOL, que estaba abrazada a la Assembléia
Popular, tampoco ayudó. Esperamos que en este Encuentro
podamos avanzar hacia una real unidad de acción, que sea
capaz de poner a los trabajadores y a la juventud en
movimiento.
Entretanto,
para que el Encuentro cumpla su papel de organizador de la
resistencia contra los ataques que están siendo orquestados
por el gobierno Lula y su pandilla, es preciso que se vote
en forma unitaria un plan de luchas que unifique por la base
al conjunto de los movimientos sociales, sindicatos,
asociaciones, DCEs []
y demás organizaciones en lucha, con un programa que
denuncie de forma inequívoca a Lula, al PT y a la CUT como
los responsables directos de la miseria y la explotación a
que están sometidos los trabajadores.
Para
luchar consecuentemente contra las reformas es necesario romper con Lula. En ese sentido hallamos progresivo que
sectores del MST []
participen del Encuentro. Pero es necesario ir más lejos:
es indefendible que dirigentes del MST sigan diciendo que el
mayor enemigo no es Lula sino el imperialismo.
Hoy,
concretamente, Lula es el agente
directo del imperialismo en Brasil y en toda América
Latina. Por eso, en Brasil, ser antiimperialista significa
ser opositor intransigente a Lula y a sus aliados, nuevos o
antiguos burócratas. ¡El resto es capitulación!
Planteamos
que este Encuentro vote una jornada
de luchas organizada desde la base, que incluya
asambleas en los sindicatos, universidades y barrios
obreros. Que haya un plan de luchas, que se inicie
con actividades en las distintas ramas, actos de la izquierda independiente de la burocracia el 1º de Mayo,
culminando con una gran
marcha centralizada en San Pablo dentro del primer
semestre.
• ¡No a las reformas laboral,
sindical, del sistema de retiro y universitaria!
• ¡Ni un real para los banqueros!
• ¡No al pago de las deudas interna
y externa!
[1]
Central sindical conducida por la burocracia del PT.
[2]
Organización de estudiantes universitarios dirigida por
el PCdoB (Partido Comunista do Brasil, sirviente de
Lula) y el PT.
[3]
Fundo de Garantia do Tempo de Serviço: fondo
constituido por depósitos que hacen los trabajadores
con empleo.
[4]
Se refiere a la grave crisis política que estalló en
2005, al hacerse pública la fenomenal corrupción que
reina en el parlamento, el PT y el gobierno.
[5]
Diretório Central dos Estudantes.
[6]
Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra.
|