Carta
de un trabajador de FATE
A
todos mis compañeros:
Los
trabajadores de FATE en las elecciones
para delegado de sector del día 6 y 7 de
septiembre tenemos que usar un poco de sentido común,
despertarnos de una buena vez y también tener en cuenta que
hay gente como muchos de nosotros que no
pertenecemos a ningún color patronal ni perteneceremos
jamás porque tenemos dignidad y respeto por nuestros compañeros
y por nuestras familias.
Desde
nuestra humildad y sinceridad no nos prestaremos jamás al
amiguismo, clientelismo, juegos políticos, ni intereses
personales, ni económicos sólo para unos pocos. Unos pocos
impunes, descarados, ladrones y sinvergüenzas.
Los
trabajadores de FATE de buen corazón y de dignidad,
que sólo sabemos ganar lo que tenemos con el sudor de
nuestra frente, tenemos que ser determinantes a la hora de
definir y pensar no
votar por la Bordó, la Violeta, o la Celeste y Blanco.
¡Esos nunca más!
Porque
estamos cansados que nos caguen, por los abusos que venimos
sufriendo los trabajadores de FATE desde hace 17 años. No
nos podemos olvidar de los aprietes, los robos, los asaltos
a mano armada, los convenios oscuros firmados por nuestros
“representantes” fantasmagóricos, que nunca están pero que a la hora de firmar se hacen presente para
cagarnos y firmar sólo lo que a la empresa y a ellos
les conviene.
Están
con De Luca, Saco, Murillo en largos almuerzos, en lujosos hoteles de la Capital y nosotros cansados y con los
huevos llenos de abusos de nuestros “ex dirigentes” y
“dirigentes actuales”,
que sólo se cubren las espaldas y se
acovachan como ratas con guardaespaldas que pagan con
nuestros salarios
¿A
qué le temen?
Dicen
que repudian la violencia. Pero violencia
es mentir, arruinar vidas y familias enteras como ellos
hicieron a través de todos estos años de dirigencia
vendida y oscura. No hay que olvidar el fraccionado de
vacaciones, los premios celulares, los aumentos mentirosos, los fraccionados de premios anuales que
sólo sirven para pagar indemnizaciones, etc. etc.
Ahora,
nuestros “dirigentes” se hacen los desentendidos cuando
despiden a nuestros compañeros, cuando reclaman justamente
en la puerta de fábrica que lo incorporen o que le paguen.
También
quiero manifestar mi
repudio a esos “compañeros” alcahuetes, bocones,
borrachos, come chorizos, punteros gremiales con los que
cuentan nuestros “dirigentes” a la hora de enlistar
miembros, para que no destapen, ni aclaren las mentes de
algunos compañeros oprimidos como nosotros, los que no
damos más…
Como
si fuera poco, después de trabajar como burros por 6 ó 7 mangos la hora se nos aprieta, se nos marca. Nos
quieren hacer creer que está todo bien, que es todo legal, que
nosotros somos violentos, locos y desmemoriados e
ignorantes.
Compañeros:
demostrémosles que no es así. Digamos basta
de lo mismo, sepamos elegir libremente para que no nos
equivoquemos nunca más y que tampoco digan que los nuevos
candidatos son más de lo mismo, porque en el conflicto se
demostró quién está de nuestro lado y quién de la
patronal.
Un
laburante de FATE
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