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Elecciones
a delegados en FATE
Un
triunfo histórico
Por
Rodolfo Torres
En
primer lugar, desde el nuevo MAS, queremos felicitar
a todos los compañeros de FATE, que contra viento y marea,
lograron imponer su
voluntad con la herramienta de la democracia obrera.
Este elemental derecho democrático, votar y que se respete
lo que decida la mayoría, es por lo general violado por los
“dirigentes”. En el caso de FATE, se les negó por casi
un año el derecho a votar. Luego vino el conflicto, el
desconocimiento a las asambleas por parte del sindicato, los
plebiscitos, los aprietes, las persecuciones, las
suspensiones arbitrarias, los arreglos. Por último, la
campaña sucia
(ver recuadro).
Los
resultados están a la vista: 9
delegados independientes de la lista 8 de mayo (día en
que cortaron la Panamericana), un independiente que no formó
parte de la lista, 3 de la Violeta (de Wasiejko), mientras
que el histórico “dirigente” de la fábrica, el
“Pollo” Piexzara… tiene que ir a ballotage (ver
cuadro).
Esta
es la respuesta categórica
a los últimos 15 años de entregas: de pérdida de
salarios, de estándares insoportables, de condiciones de
superexplotación, de los fines de semana sin la familia,
etc., que la empresa impuso con la complicidad del SUTNA.
Se completó el balance del conflicto con un triunfazo
Cuando
terminó el conflicto, dijimos que había sido un paso
adelante, que si bien no se logró todo por lo que se había
luchado, era mucho más de lo que la patronal quería dar y
de lo que el sindicato hubiese conseguido. Pero que lo más
importante era que se abría la
posibilidad histórica de una nueva dirección para la fábrica:
esa posibilidad es la que concretaron
los obreros de FATE el 6 y 7 de septiembre.
Este
es un hecho que en la última etapa de la historia de los
trabajadores, aunque le parezca raro a numerosos compañeros,
no tiene muchos antecedentes. Por lo menos desde los años
70 no ocurría que en una de las fábricas industriales más
importantes del país (ocupa a 1.400 trabajadores, con alta
concentración de capital, ligada a la industria automotriz
en plena expansión), gane el cuerpo de delegados una
lista independiente de todo sector patronal o burocrático.
Lista que es hija
directa de una rebelión obrera, que duró tres meses y
que impuso veedores de base, negociadores de las bases, el
paro adentro de fábrica, las marchas y los cortes de ruta y
que sobre todo marcó a fuego el método
de asamblea, el “todo en asamblea” para discutir y
decidir.
Pero
también los compañeros deben saber que son parte de algo
mayor: son parte de toda una nueva generación obrera que ha entrado a trabajar en las
condiciones de esclavitud que lograron imponer durante los
90 y que ahora se rebelan a esas condiciones. Y que también
son parte de una vanguardia obrera que comenzó a surgir a partir del
Argentinazo de 2001, que no sólo existe en FATE y que
está integrada por cientos de compañeros, activistas,
delegados y seccionales, por ejemplo los compañeros del
Casino de Buenos Aires, del Hospital Garrahan, del Hospital
Francés, del diario Crónica, del frigorífico Ecocarnes,
de las seccionales opositoras al SUTEBA y muchos otros.
Esto
recién empieza
Hay
que ser concientes que las cosas no van a ser fáciles;
tanto porque la patronal sigue siendo la misma patronal durísima
como porque todo hace suponer que en los próximos meses se
va a venir un ajuste
de la mano del pacto social que propone Cristina K y demás
candidatos patronales. Este acuerdo o pacto no es otra cosa
que una “alianza” gobierno-empresarios-CGT y la CTA para
implementar un plan de ajuste y que la inflación –entre
otras cosas– la paguemos los trabajadores mientras ellos
se llenan los bolsillos con fabulosas ganancias. La
implementación de ese ajuste tiene un obstáculo importante: las direcciones independientes a la burocracia, que
no van a aceptar dócilmente perder más salarios y
condiciones de trabajo. Es concretamente contra estos
sectores que el
gobierno, en acuerdo con la burocracia, intentarán
“disciplinarlos”, es decir, derrotar a los sectores
de vanguardia para imponerles los salarios miserables y las
condiciones de esclavitud. Este operativo ya está en marcha
y es lo que explica tanto la Gendarmería en el Hospital
Francés como el actual ataque a los delegados del Subte.
Por
eso es muy importante que los nuevos delegados y activistas
comiencen a salir de las fronteras de FATE e ir a informar y hablar con los
compañeros activistas que están surgiendo en las otras fábricas
del neumático y del resto de las empresas, y que apoyen a
otros sectores que están en lucha y/o atacados por el
gobierno y la burocracia.
Una
nueva etapa que nos va a poner a prueba
Ahora
sí se abrió una nueva
etapa en la fábrica. El nuevo Cuerpo de Delegados no
tiene experiencia y va tener que ir adquiriéndola con el
tiempo. La patronal y la burocracia ya van a empezar a
buscar las maneras de debilitarlos, intentarán dividirlos,
intentarán comprar a algún compañero, intentarán hacerse
los “amigos”, etc. Para enfrentar todas estas posibles
maniobras hay mucho por hacer. En primer lugar, terminar de derrotar al “Pollo” en la segunda vuelta, pero
sobre todo consolidar
la agrupación 8 de mayo, organizándola con todos los
compañeros que lo deseen, haciendo plenarios, organizando
talleres de capacitación sindical para que todos los compañeros
conozcan sus derechos, etc. En segundo lugar, y casi de
forma inmediata, hay que ordenar
el pliego de reclamos sector por sector para ir a
discutir con la empresa, pliego que debe incluir
todas las demandas de la base. Hay que exigir la
convocatoria a las reuniones de cuerpo de delegados abiertas
a la participación de todos los compañeros que quieran ir,
y si no convocarla los propios delegados.
Junto
a todas estas tareas, hay una fundamental:
pelear por que haya elecciones para la seccional lo antes
posible. Esta también será una batalla difícil, una
nueva pelea para que se respete a las bases, porque la
burocracia, con los resultados en la mano, intentará por
todos los medios impedir que las bases obreras de FATE se
alcen con otro triunfo de gran proyección.
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