Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 110, 13/09/07
 

 

 

 

 

 

Paraguay: la “justicia” del presidente Nicanor Duarte Frutos

¡Se ríen en nuestra cara!

Desde Asunción, por Antonio Cáceres
De Agrupamiento por el Socialismo

En los últimos días, en el Paraguay se han sucedido una serie de hechos de gran importancia para la coyuntura política en ese país. Tanto Lino Oviedo como los Paiva (padre e hijos) han sido liberados de su encarcelamiento. En el primer caso, se trata de una obvia maniobra del régimen colorado para cerrarle el paso al creciente peso electoral que parece estar asumiendo la candidatura reformista del ex obispo Lugo. En el segundo, se vio una muestra de cómo funciona la “justicia”, con un fino sentido de clase, por la cual se deja en libertad a los dueños del supermercado Ykuá Bolaños, responsables de la muerte de más de 500 personas sólo para defender la recaudación del día. Publicamos también una convocatoria a marchar contra la libertad de Lino Oviedo cursada por la “Coordinadora contra la impunidad y el autoritarismo”, organismo impulsado por nuestra agrupación hermana Agrupamiento por el Socialismo de Paraguay.

Con tan sólo 24 horas de diferencia, la justicia militar liberó a un ex general golpista y la justicia civil liberó a uno de los principales acusados por la muerte de 400 personas en el incendio del supermercado Ykuá Bolaños.

No es casualidad que hoy estén libres los principales acusados y protagonistas de estos crímenes, la "jornada sangrienta" en las plazas durante el marzo paraguayo de 1999 y la tragedia del Ykuá Bolaños del 2005. El sufrimiento ante la injusticia de las madres de los mártires del marzo paraguayo hoy se suma al de las más de 500 víctimas directas e indirectas del supermercado.

Ambos hechos tienen algo en común: la impunidad absoluta de los poderosos, de los que se enriquecieron con el contrabando y el narcotráfico al amparo del régimen autoritario y corrupto de la burocracia del Partido Colorado. Tanto Paiva como Oviedo iniciaron sus respectivos "negocios" y fortunas ya en la época stronista. Ambos son hijos dilectos del régimen que lleva más de 60 años en el poder.

La justicia en Paraguay es cosa inalcanzable para los trabajadores

En el proceso judicial del caso Ykuá Bolaños, los plazos y medidas a favor de los acusados se cumplen con una puntualidad única en nuestro sistema judicial. A esto claro está, hay que sumar la predisposición que reciben de los jueces y tribunales, sin contar la cantidad de abogados defensores públicos (como si le faltaran particulares bien pagados) destinados para su defensa, mientras que cientos de presos pobres en las cárceles públicas, seguro que llevan años encerrados sin ver a uno solo.

En cambio para las víctimas, a pesar de los pedidos, urgimientos, reclamos, movilizaciones, etc., todo parece ir a paso de tortuga. Y hasta ahora, del aparato estatal, no han recibido más que represión policial.

Por su parte, en el caso Lino Oviedo, es conocido por todos las negociaciones entre el oficialismo colorado y el oviedismo. Y que la liberación del mismo no pasa por un cumplimiento de plazos procesales sino de una movida oportunista del Nicanorismo dentro de la coyuntura electoral.

Para Nicanor, el remedio será peor que la enfermedad

Lo “simpático” del caso, es que la liberación de Oviedo (como una forma de tratar de contrarrestar la situación calamitosa de los diversos proyectos electorales del Partido Colorado frente a su principal oponente), puede terminar afectando no sólo al proyecto Lugo, sino a los propios colorados.

La sed de poder del oviedismo, de esta facción filo fascista, es incontrolable. Si fue capaz de utilizar el asesinato político y los métodos propios del fascismo, de violencia abierta contra los trabajadores y cualquier sector burgués que se le oponga, no va a existir pacto que valga a la hora de ponerle de vuelta el collar a este perro rabioso.

Ninguna confianza en los partidos patronales ni en el obispo Lugo

Luchemos unidos por nuestra dignidad y contra la impunidad de los poderosos

Hacemos un llamado a los trabajadores y al movimiento popular, a salir a las calles y a movilizarnos para oponernos a estos atentados contra las conquistas democráticas, contra la impunidad y la corrupción del Poder Judicial esbirro del nicanorismo, para honrar y exigir respeto por la memoria de nuestros mártires caídos en el "marzo paraguayo" y las víctimas del Ykuá Bolaños. Sólo la unificación de ambas luchas puede garantizarnos la victoria.

Debemos tener en claro en este momento, tanto la “Coordinadora por la Impunidad y el Autoritarismo” como la organización de las víctimas del Ykuá Bolaños, que nuestra lucha por la justicia es una sola y que los enemigos a vencer ya cerraron filas.

En este momento contamos sólo con nuestras fuerzas. Ningún proyecto electoral, ni de Alianzas o Concertaciones como el caso del obispo Lugo y, menos que menos, de la burocracia colorada, se han pronunciado claramente de nuestra parte sobre ambos temas. Con el apoyo abierto o el silencio cómplice ya tomaron partido.

De nosotros depende.