Socialismo o Barbarie, periódico Nº 126, 08/05/08
 

 

 

 

 

 

Mafissa: Habla Charly

“No vamos a bajar los brazos hasta que
desprocesen a los compañeros”

Mafissa sigue en lucha. Sobreseimiento de los 18 compañeros acusados de coacción agravada es la principal consigna que levantan junto a la de reincorporación de los despedidos. Brutal desalojo, detenciones en comisarías y causas judiciales fue la política del gobierno de Scioli, en sintonía con la línea de Kristina de reprimir las luchas obreras. Además, montaron una campaña de intimidación permanente contra Hernán García, secretario general de la interna, al que le agregaron otra causa y le allanaron la casa.

Alberto Pérez, jefe de gabinete de Scioli, había adelantado que para el gobierno provincial la salida al conflicto de Mafissa trascendía la esfera del Ministerio de Trabajo y era “política”. En ese contexto, en sintonía con la línea de los Kirchner, el jueves 17 de abril por la tarde Olmos fue sitiada por más de 400 policías con carros de asalto, motos, caballos y el grupo Halcón para desalojar la planta.

Sin perder tiempo, la patronal, custodiada por la Infantería, puso en marcha la fábrica el lunes 21. Al igual que había ocurrido en Dana, recurrieron a micros para meter en la fábrica a los trabajadores y evitar el piquete de convencimiento de los compañeros en lucha. Por su parte, el Ministerio de Trabajo de Nación aportó su granito de arena al comunicar que le daba validez a la asamblea de la burocracia en la que, sin quórum, revocó el mandato de los delegados.

Hablamos con Charly, unos de los principales activistas de la lucha.

SoB– ¿Cómo sigue la lucha de Mafissa?

Ch– Estamos acampando en la Plaza San Martín, enfrente de la Gobernación, desde el miércoles 23 de abril, después de una marcha que hicimos con la gente de la multisectorial por el centro de La Plata. No nos pensamos mover de acá hasta que baje Scioli y se comprometa a que no quede ningún compañero encausado. Nosotros somos trabajadores que salimos a luchar, no delincuentes. Queremos volver a trabajar y no andar por los tribunales. Estamos haciendo una campaña con un petitorio y se están pegando afiches por todos lados. Hacemos responsable al gobierno de los que nos pasa a los trabajadores de Mafissa.

SoB– ¿Qué rol viene cumpliendo el gobierno en este conflicto?

Ch– Siempre jugó para la patronal, ya desde el lock out patronal de 42 días del año pasado, cuando se negó a sancionar a la empresa y permitió que Curi nos desgaste. Después, cuando bajó la doble indemnización para que los patrones pudieran despedir, como lo hicieron con nosotros. Cuando conseguimos arrancarle la conciliación obligatoria al Ministerio de Trabajo, jamás movieron un dedo para hacerla cumplir. Avaló la asamblea trucha de la AOT en Capital, en la que echaron a los delegados, pese a que no tenían quórum. Se dice un gobierno de los derechos humanos, pero a nosotros nos mandó más de 500 policías, con motos, caballos, de todo, por querer pelear para mantener a nuestras familias. A los 18 compañeros los repartieron por comisarías de todos lados con presos comunes.

SoB: ¿Cómo veías las cosas cuando empezaron a luchar, allá por el 2005, y cómo las ves ahora?

Ch: Hasta el 2005 se nos morían dos compañeros por año por las terribles condiciones de trabajo que sufríamos. En el 2005 empezamos a dar un paso grande cuando elegimos delegados nuevos, de nosotros. Empezamos a luchar por salario, por condiciones de trabajo. Ahí teníamos claro ya quién era la patronal porque la sufríamos de toda la vida. Yo tengo 15 años de sufrirla en la fábrica, así que eso lo tenía claro. También que la burocracia entrega a los trabajadores, porque también la sufría. Pero lo del gobierno no lo veíamos así, porque tenía un discurso lindo. Ahora veo las cosas más claritas. Nos ayudó mucho que se acerquen los de la multisectorial, los partidos de izquierda como ustedes, que nos ayudaron a abrir la cabeza, a ver las cosas cómo son. Por ejemplo, yo nunca había participado de un acto como el 20 de diciembre, cuando marchamos con los de FATE y los del Casino, a los que también les dieron muy duro, o en un acto como el del 1º de mayo, en el que se dijeron las cosas claras en relación al gobierno y también a los patrones del campo, que cada uno tira para su lado pero no para el trabajador. Ahora me siento en mejores condiciones para enfrentar las peleas.

SoB– ¿Qué le dirías a un obrero que se está preparando para salir a luchar por salario y/o condiciones de trabajo?

CH– Que es muy importante que analicen bien dónde están parados, con quiénes se enfrentan. Nosotros tenemos enfrente a Curi, a la burocracia de la AOT, a un juez que nos mandó el desalojo, pero sobre todo al gobierno, que es el que está atrás de todo. Es muy importante saber contra quiénes peleamos. También que hay que hablar bien con todos los compañeros para prepararlos, porque en la lucha tenemos que ser la mayoría los que estemos, ya que el enemigo es fuerte. Buscar ligarse a otros sectores para lograr solidaridad. Por ejemplo, a nosotros, como decía antes, nos apoyan mucho los partidos de izquierda, la multisectorial... También fuimos a distintos lugares de trabajo. Con otros compañeros fui a una asamblea de FATE en la que pudimos hablar y contar nuestro conflicto, todos los compañeros pusieron plata para nuestro fondo de lucha, otros compañeros [del FTC. Red.] nos aportaron comida para que vayamos tirando, también los chicos de la universidad, los de Zanón. Estaría bueno que salgan más sectores obreros a luchar. Nosotros no vamos a bajar los brazos hasta que desprocesen a los compañeros.