Socialismo o Barbarie, periódico Nº 142, 18/12/08
 

 

 

 

 

 

Intervención de Alcides Christiansen

Desde ya que todo es nuevo, todo lo que se vivió de acá para atrás, no tiene nada que ver con lo que se va a vivir de acá para adelante, tal vez hasta acá lo que se vivió puede ser o no sirve. Yo creo que esta crisis no es otra crisis, es la crisis, hubo revolución, hubo crisis, hubo ascenso, hubo derrota. El round que decía el compañero, que la patronal nos viene ganando varios rounds, no tiene nada que ver el ‘30 con ahora, yo sé que muchos lo comparan con el ‘30, pero para mí no tiene nada que ver, hasta acá sí puede ser, porque acá lo primero es lo primero, hay algo arriba que nos estaba dominando con todo, tirando bombas, votando presupuestos para matar gente, adonde se le antoje, 80.000 millones de dólares, todo eso, y eso que estaba arriba se destruyó, y cae y cae, si bien el que está abajo no salta, está más arriba igual . Entonces estamos mejor, me refiero a las masas, no estamos peor.

Va a venir peor que ahora la crisis, y se nos van a caer encima, y van a venir en contra de los trabajadores, nosotros tenemos un dicho, yo milito desde los 15 años, tengo 53, pero siempre cuando nos venía en contra decíamos: “vamos a ver cuando tengamos la revancha”. Y felizmente la revancha ésta no es que la va a dar la Revolución Rusa solamente, o los trabajadores solamente, la va a dar la clase obrera mundial, la victoria de la clase obrera del mundo, porque yo creo que nos va a resolver un gran problema la clase obrera, va a acomodar todo, va a patear el tablero, y si no es así, muere la clase. No lo veo a Bush hoy, invadiendo tal país, si los senadores le dijeron que no, esa es una crisis política tremenda, pero no es que se lo dijeron en el barrio de mi pueblo, los capos del mundo se lo dijeron.

Nosotros decìamos hace un año: “las masas yankys hijas de puta, la clase trabajadora europea… y cagándonos a tiros nosotros para salvar sus privilegios”. Y hoy tomaron una fábrica, agarraron la plata ellos, agarraron esa costumbre, pero no se van a acostumbrar, porque esto cambia, cambia mañana, me caigo y me levanto y más veces las que se levantaron los trabajadores que las que se cayeron, por supuesto que se cayeron, por eso se levantaron.

En ese sentido yo creo que no tenemos que tener miedo en relación a todas las tareas que tenemos planteadas. Por otro lado, también creo que vamos a tener gravísimos problemas en relación a las luchas, la burguesía nos va a tirar con todo, nos va a tirar con los matones, con la burocracia, nos va a tirar con la Iglesia, nos va a tirar curas por todos lados, antes te golpeaban la puerta y te querían leer el mensaje de Dios, ahora te golpean la puerta, te leen el mensaje de Dios y te dicen: ¿qué opina de la crisis mundial?

La Iglesia ya está preparada, con eso cuenta la burguesía y ahora más que nunca porque tiene la crisis adentro, los senadores no le quieren votar más nada a estos dos. “Nos van a tirar con misiles”, dicen algunos compañeros, yo calculo que está bien, que nos tiren con lo que quieran, pero la burguesía, ¿se va a unir para atacar a todos los sectores, con todo? Yo no sé si fue Marx que dijo que en momentos de crisis profunda, que va a ser tanta la desesperación de la burguesía, que se está viniendo abajo que se van a pelear entre ellos.

La cuestión esa de la General Motors que le votaron en contra, yo creo que el capitalismo está “chapado” a la antigua, no ven la crisis, no la ven, “chapado” a la antigua ¿qué quiere decir? No van a votar el salvataje, van a jugarse a la quiebra y van a empezar de nuevo, como hicieron toda la vida. Por supuesto, van a pegar con todo, la lucha por la emancipación de la clase trabajadora se va a poner más dura porque ellos nos van a cortar todo, nos van a tirar de todo, van a poner guita a los sectores lúmpenes, marginales que se están alimentando hoy con la bolsa de comida, le van a decir: “che, te querés ganar mil, andá a la casa de los obreros de Fate y le empezás a hinchar las pelotas”. Lo que no saben ellos es que nosotros también lo sabemos, y lo que no saben ellos es que la clase trabajadora mundial tiene mucha experiencia de cómo nos mataron los compañeros, tiene mucha experiencia de cagarse de hambre, lo que no saben ellos es que los trabajadores se van a tomar revancha.

¿Y si la fábrica la ponemos a trabajar nosotros? Ahora los trabajadores lo están pensando. No sé si los obreros de Fate están de acuerdo de que el patrón tiene que estar ahí para darles de comer, (le contestan que pocos), bueno esperá un poquito a cuando eche cien, porque lamentablemente para los que nos contratan, no nos cortaron la conciencia. Tenemos la suerte de que nuestro partido es la memoria histórica de los compañeros, entonces no se corta la memoria de la clase obrera, al obrero lo cagan, todavía lo cagan, sí, pero no pierde la memoria.

Cuando decimos la crisis esta, la patronal esta, se unen, nosotros tenemos que ser más vivos y unirnos con otros sectores. No tenemos que ser sectarios, pero nosotros tenemos hoy una posibilidad muy grande de crecer, cuando las masas se muevan, para mí ya se empezaron a mover bastantes días atrás, pero hay un olor a movimiento, hay ese terremoto por abajo y que el trabajador, el obrero, empieza a ver, quiere escuchar, entonces el partido tiene una condición impresionante.

¿Por qué?, primero: la calidad política y humana que tiene en este momento, por eso la Conferencia. Yo no cambio estos doscientos militantes por los cinco mil de antes, para nada, porque están justo donde tienen que estar los jóvenes hablando, me hace acordar cuando yo era joven, y yo no soy estudiante. Estamos en una condición inmejorable para ganar compañeros, por la ubicación política que tenemos en relación a la consigna política, habría que hacer folletitos, ir a puerta de fábrica, no nos va a temblar el pulso y entrás al movimiento obrero, hoy que podemos. Nos vamos a encontrar con los chaqueta amarilla, ¿saben lo que son los chaqueta amarilla? Son las patotas viejas, que la burocracia y la patronal las tienen. A veces hay que retroceder un poco, para avanzar después. Yo por qué lo digo, porque siempre fui adelante, la clase obrera tiene siempre un pie adelante. Hoy la burguesía está a la defensiva, nos va a tirar a los que estamos avanzando, compañeros, ¿nos derrotará?, ¿nos van a cagar estos hijos de puta? Cuando la movilización es nuestra, que avanzamos, avanzamos y la cana reculando, sí nos tiran gases, nosotros tenemos que tener la fuerza.