Socialismo o Barbarie, periódico Nº 158, 27/08/09
 

 

 

 

 

 

Declaración del ¡Ya Basta! frente a las elecciones en Sociales

Pongamos en pie un Frente de Izquierda
para enfrentar el ajuste

El incesante desarrollo de la crisis económica mundial sigue tiñendo de manera implacable la vida social y política de todo el mundo. A los sucesos de meses anteriores, la caída de símbolos fundacionales del imperialismo yanqui como lo eran la General Motors o la banca Lehman Brothers, se siguen acumulando día a día miles y miles de despidos. En lo que constituye una verdadera masacre mundial del empleo, millones de trabajadores han perdido sus trabajos, sus pensiones y hasta sus viviendas. Los capitalistas están dispuestos a descargar todo el peso de la crisis sobre la clase trabajadora, con tal de mantener intactos sus privilegios.

El golpe de Estado que se está desarrollando en Honduras es una demostración de esto. El deterioro brutal de las condiciones de vida del pueblo hondureño producto de la crisis mundial combinado con el desarrollo de un proceso de organización popular representa una amenaza demasiado grande para la oligarquía vende-patria hondureña. Es por eso que, con el aval de todas las instituciones del régimen, sacaron al Presidente Zelaya en calzoncillos de su cama e instauraron un gobierno de facto.

Sin embargo, a pesar de que los gorilas están afirmados en el poder y de que se trata de un golpe hecho y derecho, desde hace más de 50 días se está manifestando una resistencia popular que se extiende cada vez más y que impide toda normalización del país. Este hecho, con pocos antecedentes en la historia, pone de manifiesto la importancia de la heroica resistencia del pueblo hondureño, sin la cual, el golpe ya se habría consolidado definitivamente y habría mostrado su cara más brutal.

Desde el ¡Ya Basta! creemos que es fundamental construir un Frente de Izquierda que impulse la organización de los estudiantes para luchar contra el golpe de Estado en Honduras y apoyar de todas las formas posibles la gran resistencia que están llevando adelante los trabajadores y el pueblo hondureño, ya que creemos que allí se está jugando gran parte del futuro de América Latina. Si el golpe pasa, se fortalecerán todas las variantes derechistas del continente, como los escuálidos en Venezuela, los autonomistas cruceños bolivianos y los ricachones del campo de Argentina. En cambio, si derrotamos la intentona golpista, será un triunfo de los trabajadores y pueblos de Latinoamérica.

En Argentina venimos de la derrota electoral del gobierno K a manos de distintas expresiones de la derecha vernácula (Macri, De Narvaéz y Cía). Estos pichones de Michelletti, a caballo del movimiento social reaccionario encabezado por la Mesa de Enlace y envalentonados por el triunfo en las urnas, le están exigiendo al Gobierno que ponga manos a la obra y realice ya el trabajo sucio del ajuste. Los K, gravemente heridos por la derrota, ya están dejando de lado todas las veleidades progresistas y comenzaron a ajustar: la inflación sigue su curso, ya empezaron los tarifazos. Lo que es claro es que el escenario para lo que viene es de un intento de “normalización conservadora” del país, en donde los K y la oposición burguesa intenten avanzar contra las conquistas y necesidades de los trabajadores y el pueblo.

El Gobierno y las camarillas quieren ajustar

En este marco, la UBA no va a quedar a salvo de este avance. Como decíamos el año pasado, la puja entre el gobierno y el “campo” era una lucha a dentelladas por el reparto de la torta, el ajuste que se viene es el intento de sacarnos las migajas que nos tocaban. Desde la bochornosa asunción de Hallú en el Congreso y con la policía K en el 2006, las camarillas vienen trabajando en “institucionalizar” y “normalizar” la vida universitaria para poder avanzar con los planes privatistas. Con el adelantamiento de las elecciones se juegan con todo barrer de los centros y de la Federación a las corrientes de izquierda combativa, que de conjunto y más allá de algunas limitaciones, son las que han encabezado todas las luchas contra las gestiones y el gobierno, para luego, descargar con todo el ajuste. Ahora tenemos que organizarnos y redoblar esfuerzos para luchar por conseguir un presupuesto acorde a las necesidades de nuestra Universidad, avanzar en el eternamente postergado edificio único, luchar junto con los docentes y no docentes por un salario digno igual a la canasta familiar, el nombramiento y pago a los miles de docentes ad-honorem.

La tarea principal que tenemos en Sociales es enfrentar a las corrientes que, como la UES y sus aliados, son las transmisoras en el movimiento estudiantil de la política de ajuste del gobierno y las camarillas. Buscan que el centro de estudiantes sea un apéndice de la gestión de turno. Los estudiantes necesitamos construir herramientas de organización y lucha que estén a la altura de las circunstancias. Esto significa un centro de estudiantes independiente de todos los bandos patronales, el gobierno K, la Mesa de Enlace del campo o sus representantes políticos: Macri, De Narváez, Carrió, Solá, Stolbizer. La independencia política del movimiento estudiantil, para ser tal, también debe delimitarse claramente de las camarillas universitarias que gobiernan la Universidad y la Facultad de Sociales y que son las responsables de la crisis en la que se encuentran. Para esta tarea, desde el ¡Ya Basta!, creemos que es necesario que las organizaciones de izquierda de la Facultad pongamos en pie un Frente de Izquierda que pelee por organizar al movimiento estudiantil para luchar y ganar.

¡Pongamos en pie un Frente de Izquierda!

El año pasado el Frente “El Tren”, encabezado por La Mella y Prisma, logró ganar el centro de estudiantes. Este frente se aprovechó del largo proceso de desgaste que arrastró a Oktubre a ser una pálida caricatura de lo que fue en sus orígenes cuando se caracterizaba por ser el polo organizador del sector más vital y comprometido del movimiento estudiantil de nuestra Facultad, terminando en un precario acuerdo.

La Mella y Cía. se aprovecharon de esa irreparable brecha que se abrió entre Oktubre y los estudiantes prometiendo una apertura de los organismos del centro para revitalizarlos y relanzar al mismo. Lo cierto es que pasados ocho meses de gestión de la Mella lo único que ha ocurrido es una profundización del vaciamiento del centro de estudiantes empezando por su instancia más importante: La Asamblea General de los Estudiantes.

La Mella y Cía. de manera premeditada impulsaron el vaciamiento y fragmentación de las Asambleas en pos de una miríada de comisiones por temas puntuales y parciales, que al fragmentar el debate son incapaces de organizar la lucha de los estudiantes en su conjunto. Como parte de esta orientación deliberadamente despolitizante, han avanzado en censurar los debates democráticos de políticas e ideas en el seno del movimiento estudiantil y sus asambleas.

Parecería que el modelo ideal de “democracia estudiantil” de La Mella/El Tren es el de un burocrático intercambio de telegramas previo a las asambleas y después… cerradita la boca. Desde el ¡Ya Basta! entendemos que este es un debate profundo y necesario. El vaciamiento no sólo formal, sino de contenido del movimiento estudiantil que impulsa la izquierda posmoderna actúa, más allá de sus intenciones, en directo beneficio de la derecha, el gobierno y las camarillas. El privar al movimiento estudiantil del debate e incluso las peleas entre los distintos sectores que los componen, en pos de la búsqueda de un supuesto consenso entre tirios y troyanos, es echarles arena en la cara a los estudiantes y dificultarles la tarea de dirimir quiénes son sus amigos y quiénes son lobos envueltos en piel de cordero.

Desde el ¡Ya Basta! llamamos a toda la izquierda independiente del gobierno y las camarillas a conformar un Frente de Izquierda en la Facultad de Ciencias Sociales que, superando las limitaciones que tuvo la experiencia de Oktubre, construya un centro democrático y de lucha con la finalidad de prepararnos de cara a las tareas apremiantes que tenemos por delante.