Socialismo o Barbarie, periódico Nº 159, 10/09/09
 

 

 

 

 

 

Universidad de Buenos Aires – Facultad de Ciencias Sociales

Abramos el debate sobre el Centro de Estudiantes

Construyamos un Centro organizado desde los cursos,
participativo y de lucha

Agrupación Ya Basta! - Sociales

Después de la derrota electoral del gobierno K a manos de la derecha pro–campo encabezada por De Narváez, Macri, se ha abierto un proceso de normalización conservadora del país. Por un lado, la oposición burguesa está envalentonada y con el argumento que se “respete la decisión de las urnas”, pretenden que se realice un feroz ajuste antipopular, al tiempo que la patronal agraria exige lo propio, buscando cobrarse con otro paro la cuenta impaga tras las elecciones. El gobierno K, aunque duramente golpeado, trata de seguir fiel a su estilo: “cantos de sirena” progresistas en una canasta, avanzar con el ajuste en la otra. Es que ya han quedado atrás los buenos y viejos tiempos en donde las arcas del Estado rebalsaban de dólares. El modelo K está en jaque, fiel expresión de esto es la vuelta “con la frente marchita” a los brazos del FMI. Lejos han quedado los bríos de independencia de Néstor. Mientras tanto, la situación de los trabajadores y estudiantes sigue siendo tanto o más precaria que antes. Los patrones, con la vista gorda de los K y la ayuda inefable de los burócratas de la CGT y la CTA, están aprovechando la crisis económica internacional para avanzar en precarizar el trabajo, reducir los salarios (bastante carcomidos por la inflación) o directamente en despedir masivamente. Sin embargo, los de abajo estamos demostrando que no nos vamos a quedar de brazos cruzados frente a estos atropellos. Se están desarrollando una serie de importantes y muy duras luchas obreras, como en el caso de Terrabusi Kraft donde los trabajadores están enfrentando 150 despidos y un lock out patronal, cortando la Panamericana y ocupando la fábrica. Los estudiantes tenemos que apoyar con todas nuestras fuerzas todas las luchas obreras.

En este escenario, lo que viene para la Universidad y para Sociales en particular no es otra cosa que un intento de profundización de las ya escandalosas condiciones presupuestarias. Después de 8 años de mandato, la gestión, con Schuster a la cabeza, no ha conseguido absolutamente nada. O mejor dicho, con su alianza inquebrantable con el matrimonio K ha garantizado la miseria presupuestaria y el apoyo político a cuanta medida haya impulsado este gobierno, como el observatorio de medios, la ley de radiodifusión y hasta la intervención de la patota de Moreno en el IndeK. Si durante los años de las vacas gordas, los K no le tiraron ni un huesito a Schuster por sus buenos servicios, en estos “tiempos de crisis” lo que le espera a Sociales no es otra cosa más que ajuste.

Al servicio de esta política están las agrupaciones estudiantiles afines a la gestión, encabezadas por la UES y la Cullen. Su objetivo es dejar afuera de escena al movimiento estudiantil, para poder avanzar en la destrucción de la Universidad. Son las correas de transmisión en el movimiento estudiantil de la política de ajuste y privatización. Luego de varios años de boicotear abiertamente (y fracasando rotundamente) las elecciones de Centro de Estudiantes, se presentan nuevamente. Buscan con esto transformar lo que debería ser la herramienta de organización y lucha del movimiento estudiantil en un apéndice de la gestión.

Los límites del trencito posmoderno

Desde el año pasado el Centro de Estudiantes está conducido por “El Tren”, encabezado por La Mella y Prisma. Este frente, luego de menos de un año de gestión y lejos de cumplir con sus promesas de apertura y revitalización de los espacios del centro, conduce un centro completamente vacío, en donde ya ni se convocan asambleas. La Mella y Cía. de manera premeditada impulsaron el vaciamiento y fragmentación de las Asambleas en pos de una miríada de comisiones por temas puntuales y parciales, que al fragmentar el debate son incapaces de organizar la lucha de los estudiantes en su conjunto… ¡y lo peor de todo es que hacen gala de semejante resultado! Como parte de esta orientación deliberadamente despolitizante, han avanzado en censurar los debates democráticos de políticas e ideas en el seno del movimiento estudiantil y sus asambleas. Desde el ¡Ya Basta! entendemos que este es un debate profundo y necesario. El discurso de El Tren, sobre construir una “personalidad propia del centro” basándose en los “consensos”, ignora que la personalidad del centro la construyen los estudiantes por medio de duras batallas políticas entre los que proponemos centros que sirvan para transformar la Universidad y la sociedad, y quienes bregan por centros de servicios al estilo Franja Morada o la UES. Quienes pretendan evitar las luchas en los espacios de debate y decisión de los estudiantes, castran al movimiento estudiantil en su potencialidad de dar respuesta a los ataques del gobierno, la derecha y las gestiones. El Tren quiere esconder su carencia de todo proyecto transformador hacia el centro tras frases altisonantes al estilo “revolucionar la Universidad” que sólo sirven para gastar tinta. O es que acaso la “revolución” posmoderna de El Tren la pretenden realizar por medio de los consensos???

Por esto es que desde el ¡Ya Basta! y el MAS queremos aprovechar estas elecciones para abrir este debate.  El vaciamiento no sólo formal, sino de contenido del movimiento estudiantil que impulsa la izquierda posmoderna, con su discurso horizontalista light, actúa, más allá de sus intenciones, en directo beneficio de la derecha, el gobierno y las camarillas y en desmedro de la fuerza y cohesión del movimiento estudiantil. No es posible enfrentar las políticas del gobierno, ni de la derecha, ni de las gestiones, si no contamos con un movimiento estudiantil organizado, que debata francamente cómo encarar sus luchas.

¿De regreso a Oktubre?

Desde el ¡Ya Basta! hemos venido insistiendo en la necesidad de formar un frente de izquierda para estas elecciones. Lo planteamos en nuestra declaración y en todos los cursos. Hemos participado desde que comenzaron las clases en las reuniones de discusión con las corrientes de izquierda que hoy forman el frente La Comuna. Nuestro planteo siempre fue claro, es necesario hacer un frente, pero sacando las conclusiones políticas de la experiencia. El año pasado el frente Oktubre perdió las elecciones del Centro de Estudiantes. A nuestro entender, principalmente, producto del largo proceso de desgaste que arrastró a Oktubre a ser una pálida caricatura de lo que fue en sus orígenes cuando se caracterizaba por ser el polo organizador del sector más vital y comprometido del movimiento estudiantil de nuestra Facultad. Oktubre se desdibujó en un precario acuerdo de corrientes a espaldas del movimiento estudiantil, en donde primaba la rosca y el peso de los aparatos. Esto profundizó el desgaste y el vaciamiento, llevando incluso a la parálisis del centro durante el conflicto del campo el año pasado.

Esto es lo que hizo que gran parte del movimiento estudiantil le diera la espalda en 2008. Y es a esto justamente a lo que es necesario dar respuesta.  Es por eso que desde el minuto cero, planteamos claramente la necesidad de que cualquier frente de izquierda tenía como principal tarea, superar las limitaciones que llevaron al fracaso de la experiencia de Oktubre, es decir, no podíamos reconstruir un frágil acuerdo electoral que no se basaba en ninguna visión en común sobre los problemas y tareas que tiene que afrontar el movimiento estudiantil. Ya vivimos en años anteriores cómo Oktubre, al frente del Centro de Estudiantes, no tuvo ningún pudor en suprimir las asambleas, sólo para evitar que estallen por los aires sus precarios acuerdos políticos. Desde el MAS y el ¡Ya Basta! estamos convencidos de que no hay forma de enfrentar los desafíos que nos plantea la crisis capitalista mundial, de pelear por una Universidad al servicio de los trabajadores y el pueblo, si no construimos junto con el movimiento estudiantil, organizaciones abiertas, democráticas, participativas. Esta es la condición sine qua non para poder llevar a fondo la lucha junto a los trabajadores. Lamentablemente los compañeros del Frente Oktubre, rebautizado La Comuna, han optado una vez más por el viejo y conocido (y repudiado) “atajo” de la rosca y la repartija de cargos antes que asumir la tarea de acompañar al movimiento estudiantil en su experiencia.

¡Construyamos un Centro de Estudiantes basado en asambleas, democrático,
participativo y de lucha!

Desde el MAS y el ¡Ya Basta! entendemos que los estudiantes nos debemos un franco debate sobre nuestro Centro de Estudiantes. La experiencia frustrante del anquilosamiento de Oktubre llevó a grandes franjas de compañeros a que confiaran en El Tren y sus promesas de transformación. Lo cierto es que tras meses de gestión la locomotora parece no tener fuerza. Los estudiantes necesitamos una herramienta gremial que esté abierta a todos, donde seamos nosotros desde nuestros cursos y asambleas donde construyamos e impulsemos nuestras luchas, donde las comisiones sean espacios de trabajo y discusión para sumar a todos a la actividad militante de nuestro centro. Pero las formas no remplazan al contenido, necesitamos un centro que esté preparado para afrontar los desafíos de la realidad, un centro político y de lucha. Un centro aunado a la lucha de los trabajadores, por Una universidad al servicio de las necesidades del pueblo. Un centro que sea efectivo para transformar la Universidad y revolucionar la sociedad.

Por esto es que te invitamos a que te sumes a nuestras propuestas y nos acompañes durante las elecciones… y después continuemos debatiendo en conjunto y con todos los compañeros para construir un centro de estudiantes basado en asambleas, democrático, participativo y de lucha.

• Para que la crisis la paguen los capitalistas.

• Por la democratización de la Universidad.

• En apoyo a las luchas obreras.

• Junto al pueblo hondureño contra los golpistas.

• Por una Universidad al servicio de las necesidades de los trabajadores.