Socialismo o Barbarie, periódico Nº 164, 20/11/09
 

 

 

 

 

 

Entrevista a Guillermo Pérez Crespo

“Está claro que la decisión ahora es no firmar y
está claro que la respuesta más eficaz es
la medida de fuerza”

SoB estuvo con Guillermo Pérez Crespo hablando sobre la situación de la inscripción de la Asociación Gremial de los Trabajadores del Subte y del Premetro, las consecuencias jurídicas y las perspectivas para las nuevas internas luchadoras.

SoB: ¿Cuál es la situación concreta del trámite de inscripción del nuevo sindicato?

G.P.C.: El expediente tuvo dictamen favorable en asociaciones sindicales, llegó a la viceministra Noemí Rial, elevó el proyecto de inscripción con dictamen favorable y a partir de ahí se trabó todo. “Que sí que lo vamos a firmar”, ”dénnos tiempo porque las presiones son muchas por parte de la UTA”, etc. Pasó el tiempo, no hubo solución, se decidió un amparo por mora, salió el amparo, y el Ministro no firmó la inscripción. Apeló, e intentó pedir audiencia de conciliación para ganar tiempo en la Cámara. La Cámara se lo rechazó y hoy en día la Cámara le ha otorgado un plazo para que firme la inscripción gremial.

Mientras no firma la simple inscripción homologó hace muy poco tiempo, en forma secreta, una reforma del estatuto sindical de la UTA, porque en el estatuto de la UTA no estaba en claro la pertenencia del Subte. Mientras se opone a la inscripción gremial, le da más elementos a la UTA para que pueda pelear el día de mañana el tema de la personería, porque no estaba claramente en su encuadramiento la representación del subterráneo.

En realidad lo más importante es la decisión de los trabajadores, por lo que yo tengo entendido, yo no soy representante sindical, pero tengo entendido que es llevar el conflicto hasta las últimas consecuencias, forzar al Ministerio a que firme la inscripción gremial, el conflicto probablemente vaya en incremento, salvo que el Ministerio firme. Nunca se cortó la vía de diálogo, pero está claro que la decisión ahora es no firmar y está claro que la respuesta más eficaz es la de la medida de fuerza.

SoB: ¿La inscripción gremial al nuevo sindicato del Subte cuestionaría todo el modelo sindical?

G.P.C.: En realidad no, es más, quien está cuestionando el “modelo” sindical es el Ministerio de Trabajo, al no dar la inscripción. Nuestro modelo es muy claro: el artículo 14 bis de la Constitución dice: “los sindicatos para constituirse no necesitan autorización previa, basta con una simple inscripción en el registro oficial”, y la ley después divide eso. Sindicato no hay problema, si se quiere tener la personería gremial es otro trámite y ahí hay un reconocimiento distinto, otra serie de requisitos, etc. Lo que le están negando es la simple inscripción, que ni siquiera necesita autorización previa, tiene que ser un trámite automático, se está violando la Constitución, se está violando la ley además.

SoB: ¿La inscripción te da derecho a cobrar cuota sindical, te da derecho a tener delegados?

G.P.C.: Ahí es donde empieza el otro tema y ahí sí es donde la UTA sabe que entra en crisis el modelo, la CGT lo sabe. ¿Por qué razón?, porque ahí entra a tallar el fallo de la Corte, ATE con Ministerio de Trabajo, donde la Corte señala que sindicatos con simple inscripción pueden convocar a elección de delegados, pueden solicitar el descuento por cuota sindical por planilla. Entonces esto genera una posibilidad que preocupa muchísimo.

Igual yo quiero señalar porque lo que me parece que es muy importante es la decisión política tomada por los compañeros del sindicato y por los trabajadores de Subterráneo en general. Por supuesto algunos pueden desarrollar mejor actividad que otros de acuerdo a la relación de fuerzas en cada línea, pero se parte de la concepción que sindicato hay cuando los trabajadores decidieron que existiera sindicato. Por supuesto se busca la inscripción y toda la legalidad posible, no somos ingenuos, se sabe la importancia del reconocimiento jurídico, pero hay una decisión política por la cual el sindicato aceptó que tenga que hacer reclamos, medidas de fuerza, elección de delegados, todo lo que se puede hacer se hace sin pedir autorización.

SoB: Aparte de abogado y de estar llevando buena parte de las causa de la nuevas experiencias, sos un gran conocedor del movimiento obrero ¿cómo ves la situación actual de estas nuevas internas?

G.P.C.: Es difícil responder, creo que es un proceso con algunas características nuevas, igual no soy favorable a usar la palabra nuevo, porque este tipo de procesos se han dado muchas veces en la historia del país y a veces han sido abortados o reprimidos duramente. Pero si uno tuviera que decir nuevo yo creo que los aspectos más ricos de este proceso ya estaban presentes en el 75 con las coordinadoras y las construcciones por lugar de trabajo, no es que sea nuevo.

Nuevo con respecto a las últimas dos décadas, con muchas contradicciones, no creo que todos los conflictos presenten las mismas características, ni tampoco en todos los conflictos la respuesta sindical es igual, tiene sus distintas graduaciones. Creo que lo que está prevaleciendo acá, más que la búsqueda de un nuevo modelo por parte de los trabajadores, es el sentimiento de los trabajadores de que no aparecen respuestas a las necesidades básicas en el sindicalismo actual. Lo que sí se está multiplicando, me parece a mí, es una búsqueda de soluciones prácticas. Ahora también es cierto que a través de esas soluciones prácticas, de alguna manera, se construye un nuevo modelo sindical, porque el modelo no se construye en el aire, el modelo son las formas de acción, de organización que se dan los trabajadores en lo cotidiano, y también la cultura de los trabajadores, y si tomamos eso, a mí me da la impresión que lo que se está dando, es un fenómeno paulatino de cambios en la respuesta por parte de muchos trabajadores en distintos lugares.

SoB: Desde el 2001 objetivamente hay muchas tradiciones que se recuperan, pero del 2001 hacia delante, ¿ves la emergencia de una nueva generación obrera, de una nueva vanguardia?

G.P.C.: Veo muchísimos nuevos militantes, muchísimos nuevos representantes sindicales jóvenes, algunos con mucha inexperiencia, otros que se nota que han hecho con mucha capacidad una experiencia bastante acelerada, algunos sin reproducir vicios anteriores, en otros casos no tanto, hay experiencias de construcción donde se reproducen algunos de los vicios, creo que es un desafío que no es sencillo. Pero sí creo que hay una aparición de una enorme camada de compañeros que están activando en los lugares de trabajo y que además se están incorporando nuevas formas de organización, nuevas formas de acción sindical, nuevas en cuanto a lo último que estaba agotado, esto nuevo significa retomar formas que existían hace décadas atrás y se estaban perdiendo, que nuevamente se están multiplicando, creo que hay un fenómeno bastante interesante.

Ahora, cómo va a evolucionar este proceso, es muy difícil saberlo, va a depender también de muchos aspectos. Yo creo que uno de los límites que tiene esto (entro en un terreno muy difícil) es la ausencia de una construcción sólida de alternativa política desde los trabajadores en todo el país. Me refiero a que no aparece, lo que hay es una cantidad de organizaciones que hacen mucho esfuerzo e intentan llevar adelante distintos conflictos, distintas luchas, pero no aparece un fenómeno sólido, extendido, desde la izquierda, desde los trabajadores, que permita que estas luchas se traduzcan en acumulación política, que pueda realmente poner en crisis al sistema.