Nuevamente
la crisis de la economía mundial que se está viviendo
desde 2008 es noticia. Después de una serie de meses en que
se especuló sobre la “recuperación” de la economía
mundial, que la crisis “había quedado atrás” y que, en
definitiva, “no había sido tan grave”, en las últimas
semanas se está viviendo un renovado nerviosismo en los
mercados bursátiles a nivel internacional.
Una
situación que refleja la posibilidad de que economías de
cierta importancia de la Unión Europea, como Grecia,
Irlanda, Portugal o incluso España –la cuarta economía
de la zona euro– lleguen a enfrentar un escenario de
default.
A
eso se suma la continuidad del índice de desempleo de masas
en EE.UU., cuya recuperación económica es más débil de
lo que se había especulado.
Las
obligaciones derivadas del colosal déficit fiscal y del
endeudamiento del Estado yanqui serán mucho más difíciles
de afrontar, y se podría estar frente a una posible nueva
recaída de la economía mundial y ante la amenaza de una
Gran Depresión del siglo XXI.
Por
otra parte, el recomienzo de la lucha en Grecia y la
sospecha de que será muy difícil aplicar allí la amarga
receta del ajuste –es un país que viene de una rebelión
popular a finales de 2008– es otro recordatorio de que si
bien el año que pasó la lucha de los explotados y
oprimidos fue relativamente baja, esto no está llamado a
repetirse en 2010.
Frente
a circunstancias de crisis tan dramáticas, y teniendo en
cuenta el bajo nivel del que parte la clase obrera a nivel
mundial, así como las mediaciones sindicales y políticas
que debe soportar, la respuesta obrera y popular a eventos
de semejante magnitud suele hacerse esperar, como ocurrió
en EE.UU. en la década del 30.
Sin
embargo, una lucha de clases que vuelve a fogonearse en
Grecia, así como los temores de que el índice de desempleo
en EE.UU. desate alguna forma de estallido social, son un
alerta de que podríamos estar a las puertas de un giro histórico
en la situación mundial de la lucha de clases.
Esto
es, un escenario en que se rompa el equilibrio entre clases
y estados a nivel mundial, en momentos en que la gran
promesa internacional del imperialismo que configuró en sus
inicios el gobierno de Barack Obama está transformándose
en un fiasco.
Presentamos
un número doble consagrado, en primer lugar, al seguimiento
del panorama global, pero también es de destacar el dossier
dedicado a la situación en Honduras, donde nuestra
corriente SoB Internacional, a través de nuestros compañeros
del PST
hondureño, cumplió un papel de primer orden a la
vanguardia de darle a la lucha de la resistencia
antigolpista un carácter independiente de la dirección
reformista de Mel Zelaya.
También
presentamos una elaboración sobre el imperialismo hoy y su
relación particular con Latinoamérica.
En
ese marco, se propone un rescate de la obra del economista
marxista Henry Grossman, dedicada a la explicación de las
crisis capitalistas y de los mecanismos económicos del
imperialismo.
Incluimos
asimismo en esta edición una actualización de un trabajo
publicado años atrás acerca del pensamiento de Lenin en
materia de construcción de la organización revolucionaria
y su vigencia a comienzos de este siglo XXI.
Tenemos
el orgullo de publicar dos textos de las compañeras de Las
Rojas, en momentos en que redoblamos el esfuerzo para que
nuestra corriente internacional comience a trabajar la
problemática de género más en conjunto.
De
ahí los pasos iniciales por comenzar un trabajo de Las
Rojas también en Costa Rica por parte de las compañeras
del PST.
Además,
esta edición contiene artículos sobre el estratégico
proceso de recomposición obrera en la Argentina, el
aniversario de la revolución mexicana de 1910, sobre la
relación entre el arte y la revolución social desde el
punto de vista del marxismo revolucionario y sobre la actual
coyuntura en el Brasil. Los lectores notarán que éste último
está en portugués. Como a los compañeros de Praxis no les
es fácil editar la revista entera en su propio idioma,
buscamos que al menos el trabajo dedicado a la realidad
brasileña puedan trabajarlo en portugués.
Y
para el resto de la corriente, el esfuerzo
“internacionalista” de abordar textos en otros idiomas
no por ser impuesto por la necesidad es menos válido.
En
definitiva, este número doble expresa una maduración de
nuestra corriente internacional, que también se manifestó
en el reciente Congreso del nuevo MAS, con un salto en la
calidad constructiva y generacional en la Argentina.
Esperamos
que este número le sea útil a todos las compañeras y
compañeros, obreros y obreras, estudiantes, militantes e
intelectuales marxistas que reciben nuestra revista en mano
en la Argentina, Chile, Bolivia, Paraguay, Brasil, Costa
Rica, Honduras, Nicaragua y Francia, vía la distribución
editorial de la librería Gallo Rojo o por medios electrónicos
en el resto del mundo.