Socialismo o Barbarie, periódico Nº 174, 15/04/10
 

 

 

 

 

 

Se profundiza el conflicto docente en Neuquén

Corresponsal

La lucha por aumento de salario para los docentes neuquinos puede pegar un salto, luego de que las asambleas votaran rechazar el ridículo ofrecimiento del gobierno de Sapag de un 5% al básico. En la última asamblea de ATEN Capital, más de 600 docentes levantaron la mano de forma unánime por el rechazo, y se abrió una discusión sobre cómo continuar el conflicto.

En este aspecto, empieza a “hacer ruido” en la base docente el funcionamiento burocrático que impone Guagliardo, secretario general de ATEN, con las complicidades de distintas seccionales, incluyendo Capital, que más allá de algunos cacareos no da una pelea real por cambiar el mecanismo que pone en el plenario de secretarios generales las resoluciones del gremio. ¿Cómo funciona? Muy sencillo, en el plenario cada seccional tiene un voto, independientemente del número de docentes que estén reunidos en asamblea. Cuando en Capital hay 600 compañeros, en otras seccionales se declaran 6 o 7 en asamblea, pero tienen un voto, igual al de Capital. O sea que dos seccionales con menos de 10 docentes cada una deciden más que los más de 600 compañeros de Capital. Guagliardo se apoya en este mecanismo burocrático en vez de contabilizar los votos de cada asamblea. Esta semana se repitió que la verdadera mayoría en todo el gremio (los votos totales de los docentes reunidos en todas las asambleas) planteaba paro de una semana con asamblea el miércoles o paro por tiempo indeterminado, y la burocracia en el plenario de secretarios generales impuso uno de apenas 72 horas, muy poco para un conflicto que ya viene desde el inicio de clases haciendo paros de 48 y 72 horas todas las semanas. Una vez más, se repite que la voluntad de pelear de la base choca contra la política conciliadora de Guagliardo y sus amigos kirchneristas de Amaranto (docentes ex dirigentes del FER del Comahue, devenidos pro Kristina -678 Nqn-  y grupo de choque de la burocracia).

El plenario de secretarios generales de ATEN demuestra que su “democracia” no es tal, y desde el nuevo MAS planteamos que las decisiones de cómo continuar el conflicto se hagan sobre los votos totales de todas las asambleas, y no con el mecanismo de “un voto por seccional”, porque eso atenta contra la democracia directa de los trabajadores. ¡Para llevar al triunfo la huelga docente, que decida la verdadera mayoría y se respete el mandato de las asambleas!