En el Nacional Buenos Aires las autoridades de la UBA
quieren cerrar el turno noche, y avanzando en ese objetivo,
dejaron sin presupuesto a tres divisiones del mismo que
comenzaron a funcionar este año. Esto se da en el marco de
la continua asfixia presupuestaria a que someten a la
educación pública el gobierno nacional con el aval de la
oposición patronal, asfixia a la cual se adaptan
servilmente las autoridades de la UBA y del CNBA.
A la vez que en la Universidad se avanza en el
vaciamiento y mercantilización como es el caso del intento
de acreditación de las carreras de Exactas a la CoNEAU, de
la crisis edilicia de Filosofía y Letras, es decir, en el
marco de la profundización de la política privatizadora de
la mano de un Hallú recién reelecto.
Desde hace 3 años, se agregaron tres divisiones al turno
noche (antes contaba con sólo dos, a diferencia de las
cinco de la mañana y tarde). A fin de 2009, las autoridades
de la UBA expresaron su intención de cerrar el turno noche
por completo, escudándose en quejas de padres por la
seguridad. Debemos recordar que este turno fue el más
movilizado durante el conflicto contra las sanciones
(aplicadas contra alumnos de ese turno por movilizarse), el
que estuvo a punto de tomar el colegio el mismo 16 de
Septiembre, y el que decidió tomarlo luego.
La oposición de estudiantes y docentes a este proyecto
hizo que el Consejo Superior retrocediera, pero este año
decidió no dar el presupuesto necesario para las tres
nuevas divisiones que debieron abrirse. Los docentes y
estudiantes de esas divisiones viven una situación de
inestabilidad. Mientras tanto, la rectora que el año pasado
persiguió al movimiento estudiantil, propuso efectivizar el
cierre alegando que se podían unificar divisiones a raíz
del gran número de alumnos libres. En vez de preocuparse
por garantizar la educación de los estudiantes ayudando a
que éstos mantengan la regularidad y se reciban, las
autoridades festejan los resultados de su política
expulsiva, y de paso profundizan el vaciamiento del colegio;
el número de libres alcanzó este año la cifra alarmante
de más de 230 alumnos.
El Consejo Superior y las autoridades del Nacional en vez
de exigir mayor presupuesto, privatizan las facultades
mediante la política de buscar “recursos propios” para
cubrir los que no garantiza el gobierno, pone kioscos y
estacionamientos privados, aceptan la intromisión de las
empresas privadas como como es el caso de los fondos de
“La alumbrera”, o trata de vender el campo de deportes
el CNBA. Gonzáles Gass, Rectora del Nacional puesta a dedo
por Hallú, quien vino en 2007 a tratar de regimentar al
movimiento estudiantil, con sanciones y recortando los
espacios democráticos, responde al Consejo Superior y a su
política privatista, por más que quiera hacer demagogia
debemos tener en claro cuáles son sus intereses. Tanto la
política de Hallú como la de GG llevan a lo mismo: cerrar
el turno noche por partes.
Los estudiantes del Nacional tenemos que organizarnos para
frenar este ataque al colegio, y junto con los estudiantes
del Pellegrini y de toda la UBA derrotar la política
privatista de Hallú con el aval del gobierno nacional y de
la oposición patronal.
Este miércoles marchamos al Consejo Superior, y después
tenemos que continuar la lucha y organización en el colegio
desde los cursos, discutiendo con nuestros compañeros para
poner en pie al conjunto de los estudiantes y derrotar al
Rectorado.