Luego
del masivo rechazo a la conciliación obligatoria, el
gobierno de Jorge Sapag se vio forzado a abrir un espacio de
negociación. Las audiencias que se llevaron adelante el sábado
y domingo últimos fueron una lisa y llana tomada de pelos:
dejando afuera parte del pliego de reclamos, como la solución
al problema del ISSN, el presupuesto para poner en
condiciones las escuelas, el servicio de emergencias médicas,
las viandas, etc. En el aspecto salarial la propuesta es
tramposa y miserable. Proponiendo pasar al básico el ya prácticamente
inexistente aumento del año pasado, no implica prácticamente
ninguna mejora respecto del 5% ofrecido en un principio.
La
política que ha adoptado el gobierno es de endurecimiento
contra los docentes, organizando marchas de
“padres-punteros” en contra del paro, descontando los días
al conjunto de los docentes, iniciando un proceso para
quitarle la personería jurídica al sindicato por no acatar
la conciliación. En este marco, el Secretario General de la
CGT provincial, Sergio Rodríguez, ha salido a solidarizarse
con el gobierno atacando a los docentes. Por su parte, ATE
provincial ha acordado un aumento para los auxiliares de
escuela de $ 300 en cuotas, dividiendo la lucha docente de
la de los estatales.
Es
decir, se está montando un ataque de conjunto a la huelga
docente. Pero las cosas no parecen estar saliéndole como
esperaba. Los compañeros y compañeras están muy firmes.
En las masivas asambleas y en las actividades queda de
manifiesto la voluntad de seguir y profundizar la lucha. A
su vez, se ha conquistado el apoyo de padres y madres, que
se manifestaron en dos ocasiones, triplicando en número la
marcha de los padres-punteros.
Sin
embargo, el principal obstáculo que tenemos está dentro de
nuestras filas. La burocracia de Guagliardo intentó la
semana pasada suspender las medidas durante 48 hs. para
“dar una tregua al gobierno y que nos entregue la
propuesta”. Frente a la cara de indignación y bronca de
la mayoría, tuvo que salir una de las referentes
guagliardistas a reacomodarse. Igualmente se votaron las dos
propuestas… 900 votos a favor de seguir el paro semanal,
contra 50 que querían la “tregua”, fue una respuesta más
que contundente.
Son
estas asambleas de base las que le están marcando la cancha
a la burocracia. Es gracias a la firmeza de los compañeros
que se sigue peleando, a costa de la conducción. Es este el
camino que hay que seguir. Desbordando al Plenario de
Secretarios Generales, que en más de una ocasión ha pasado
por arriba la voluntad de la mayoría de los docentes
provinciales.
Párrafo
aparte para la CTERA, cuyo rol en todo esto no es menos
escandaloso que las declaraciones de Rodríguez de la CGT.
Frente a semejante conflicto, la única acción que se le
conoce fue un “circo” para los medios en la Casa de la
Provincia de Neuquén, que duró lo
que tarda un camarógrafo en tomar algunas imágenes.
Tanto el sector yaskysta de la CTA, con el de De Gennaro
–cómplice de la oposición patronal de derecha– no
hacen más que reafirmar sus traiciones a los trabajadores.
En
esta durísima lucha, la única manera de triunfar va a ser
por medio del endurecimiento de las medidas. Frente a un
gobierno duro, redoblemos los esfuerzos y profundicemos la
lucha. Derrotemos el ajuste que quieren imponernos los
Kirchner, Sapag y la oposición.