Ganó la lista antiburocrática
SoB estuvo con Martín
Salvador, que acaba de ganar la interna del molino ubicado
en medio de una de la zonas más ricas del “campo”
argentino. Esto muestra la profundidad del proceso de
recomposición y que la nueva generación obrera va mucho más
allá del Gran Buenos Aires.
SoB: Contános un
poco cómo fue el proceso de la elección.
M.: Bueno, nos pusieron varias trabas para poder
presentarnos, porque nosotros ya habíamos armado lista hace
dos años atrás y estuvimos muy cerca de ganar, perdimos
por 5 votos. Ahora pretendían que no haya una lista
antiburocrática e independiente que les disputara la
interna, porque veían que perdían entonces empezaron con
trabas de tipo estatutarias que fuimos enfrentado y
denunciando al conjunto de los compañeros para que vieran
lo que estaban haciendo. Bueno finalmente le ganamos a la
interna que está ligada a la burocracia del sindicato,
ganamos por 78 votos contra 52. Es la primera vez que una
lista antiburocrática gana en Molinos Chacabuco; incluso en
todo el ambiente molinero de la zona te diría. En esta
oportunidad la gente votó un cambio rotundo, por una
alternativa mucho más representativa de la base y ahora
tenemos que empezar a trabajar para realizar nuestra
propuesta de asamblea en la fábrica, de consulta permanente
a los compañeros, de elegir el cuerpo de delegados de
sector y de turno para que tengan representantes los compañeros
ir por el tema de los eventuales que son compañeros que están
con trabajo precario y empezar a luchar y meter presión en
el sindicato hacia el sindicato central.
SoB: Te hicieron una
campaña macartista por ser “zurdo” y reconocido
militante del Nuevo MAS. ¿Cómo sorteaste ese obstáculo?
M.: Los prejuicios que tienen los compañeros se borraron a
través de la campaña que hicimos. Todos me defendieron con
el argumento de no discriminar políticamente a nadie.
Contra la campaña de la burocracia que yo sólo venia a
hacer quilombo, explicamos nuestras propuestas y denunciamos
que ellos son pro patronales. Los mismos compañeros respondían
nosotros venimos a organizar a los trabajadores.
Incluso la patronal tuvo que reconocer ese prejuicio ante mí
y dentro de los otros molinos esos prejuicios todavía
existen porque la burocracia hace esa campaña de
desprestigio hacia mí.
SoB: Contános cómo
son las condiciones de trabajo en el molino.
M.:
Las condiciones de trabajo son, como en muchos lugares,
muy flexibilizadas y los que más las sufren son los
eventuales. Tenemos problemas de salud, de espalda y
cintura, los compañeros están muy preocupados porque
tienen mucha exigencia física al hacer muchas horas extras.
La patronal se aprovecha de la necesidad de los compañeros
porque no hay un buen sueldo. Nosotros obviamente pagamos
los platos rotos porque no estamos con nuestra familia y
sufrimos el tener un convenio muy flexibilizador que viene
de los años noventa. Los turnos son de 8 horas pero a veces
te hacen quedar 10 ó 12 horas, dependiendo de la producción
que ellos tengan, los turnos son rotativos.
SoB:
¿Querés
agregar algo más?
M.:
Quiero agradecer a todos los que estuvieron apoyando a
Alternativa Molinera, porque no sólo apoyaron a un
integrante de un partido político como el Nuevo MAS, sino
que también apoyaron la recomposición de este movimiento obrero que está empezando a
levantarse de a poco, que está buscando una forma
alternativa de dirección y de organización y al
partido que estuvo conmigo en todo momento y con mis compañeros.
También agradecer a mis compañeros que me apoyaron
rotundamente y ahora hay que empezar a luchar todos juntos
para lograr una mayor democracia dentro de nuestro sindicato
y poder empezar a lograr que los compañeros no le tengan
miedo a la política. Tenemos que empezar a entender que para
empezar a organizarnos necesitamos ver las cuestiones políticas
de fondo, que yo siempre intento remarcar, que van de la
mano junto a nuestras reivindicaciones como trabajadores.