Un nuevo
escándalo de adulteración de pruebas sacude la causa
Noble. No es nada “llamativo” ni “sorpresivo” que
una nueva trampa haya impuesto la familia (con el grado de
guiño o complicidad que puede haber tenido desde
funcionarios judiciales o policiales). Sumado a esto,
Marcela y Felipe se van del país y se presume que la
empresaria también está en el exterior. Ya es una
provocación a cara descubierta.
No hay
otra forma de contestarla y llegar a la verdad que tomando
medidas definitivas y efectivas para que se la conozca.
Desde el
gobierno y la organización de las Abuelas de Plaza de Mayo
se ha lanzado una fuerte campaña mediática contra el
multimedio Clarín y el abogado de los Noble, el ex juez
Cavallo.
Pero con
denuncias y más denuncias y más pruebas de peritos y
expertos confirmando y explicando científicamente la
adulteración ya recontraprobada, no se llega a solucionar
el caso. Tampoco esperando que resuelva el Tribunal y
confiando en el accionar de la Justicia y en las nuevas
medidas que pueda tomar la jueza Arroyo Salgado.
Porque a
pesar del escándalo de la fragua de pruebas, el imperio
Noble no retrocede.
El caso
Miara
El ex
comisario Samuel Miara fue condenado a 12 años de prisión
por la apropiación de los mellizos Toloza durante el año
1977. Con la caída de la dictadura, Miara y su mujer se
fugaron a Paraguay. Por denuncias realizadas a las Abuelas,
fueron ubicados allí y se logró su extradición en 1989, año
en que se comprobó la verdadera identidad de los hermanos.
Fue, como
lo expresó la sra. Estela de Carlotto en el programa
“6-7-8”, el caso con antecedentes más similares a éste
que debieron enfrentar. Con la diferencia de que la pelea no
es sólo ahora contra la impunidad de los ex represores,
sino contra el poder económico y político de una de las
patronales más fuertes y negreras de la Argentina.
Repudio a
la campaña gorila
Desde
estas páginas condenamos el accionar reaccionario y a favor
de la represión de la patronal del grupo Clarín, sus
abogados simbolizados en la imagen repudiable del doctor
Cavallo, sus cómplices y encubridores.
Y, al
mismo tiempo, exigimos que el gobierno K y su justicia tomen
medidas efectivas para ganar esta pelea por la identidad.
Para que
queden como los “malos” de la película, le alcanza al
gobierno con la campaña mediática. Pero para ganarles
realmente a los Noble y a los apropiadores de todo pelaje,
hace falta una campaña de movilización en las calles y
exigencia de que se realicen las pruebas sin más vueltas.
Que la
familia Noble tenga que volver al país y se sometan a las
pruebas. Las que fueron víctimas cuando fueron apropiadas
en estos momentos actúan como parte del andamiaje de
encubrimiento, aunque sean “presionados” a ello y en
contra de su voluntad. Por lo tanto, se les debe obligar a
que vuelvan al país y sean sometidos a las pruebas. Lo
mismo a la señora Noble que aún no está presa.
Castigo a
los apropiadores
En este año
se confirmaron nuevas condenas a apropiadores, como la de Víctor
Enrique Rei, ex comandante de Gendarmería Nacional; otros
juicios se están desarrollando en el país como el primero
contra represores en Mendoza y al mismo Videla lo vemos
nuevamente ante un tribunal, por primera vez desde el Juicio
a las Juntas.
Cuando
estos avances, aunque parciales y retaceados, con muchas
contradicciones, se están desarrollando, es el momento para
que esta causa no se vuelva a entorpecer y quede detenida.
El gobierno K tiene la responsabilidad política de que esto
no suceda.
Desde los
organismos y la izquierda independiente debemos empujar para
que se concreten movilizaciones y acciones para lograr:
• Toda
la verdad en la causa Noble
• Cárcel
para todos los apropiadores, cómplices y encubridores