Se conformo la lista clasista
Rosa-Gris-Verde
En estos días se conformó y oficializó la lista
clasista Rosa-Gris-Verde para las próximas elecciones de
CTERA a realizarse el 2 de septiembre. Como integrantes de
la agrupación docente “Carlos Fuentealba” y la Lista
Gris, hemos venido dando una batalla política para el
armado de una lista clasista en el gremio docente y
entendemos que la lista conformada con los compañeros de
Tribuna Docente (PO), el secretario general de SUTEBA
Escobar de la agrupación Almafuerte, los compañeros de la
Verde de Echeverría, y
otros grupos independientes del país, ha sido un importante
paso adelante en el camino de dar batalla hacia el interior
del gremio desde posiciones
clasistas. Una lista que se planta como una alternativa
política para todos los activistas y la base docente que ha
venido luchando en las experiencias de los SUTEBAs
combativos, las últimas huelgas de Neuquén y las demás
provincias que han desbordado a la burocracia de la Celeste
y que quieren realmente un sindicato para la lucha,
antiburocrático e independiente del gobierno K, de los
gobiernos provinciales y de todo sector patronal.
La importancia de una lista clasista en CTERA
Las elecciones de CTERA se llevan a cabo en el marco más
general de las elecciones de la Central de Trabajadores
Argentinos (CTA), que nuclea a los docentes de CTERA. Se
realizan con pocos días de diferencia. Como sabemos, la CTA
se encuentra dividida por primera vez, expresando la división
patronal en las alturas entre gobierno K y oposición
patronal y como hemos expresado en las distintas ediciones
de este periódico, es necesario dar una batalla por la
conformación de una lista clasista en las elecciones de la
Central que enfrente a los dos sectores burocráticos de
Yasky y De Gennaro.
Por otro lado, en el gremio docente venimos de un
retroceso importante con la pérdida de los SUTEBAs
combativos de la Provincia de Buenos Aires, que recuperó la
burocracia Celeste. Es por eso que en estas elecciones
estamos ante la imperiosa tarea de delimitar y fijar
posiciones de cara al activismo y la base docente y preparar
el terreno para las luchas que, más temprano que tarde, se
desarrollarán.
En ese sentido el armado de la lista Rosa-Gris-Verde ha
sido un paso muy importante. No sólo porque se delimita
claramente con una política de enfrentamiento a la
burocracia Celeste de Yasky-Maldonado-Baradel, sino porque
marca también una delimitación con las corrientes
enrolados en la lista Lila
nacional (centralmente la lista Azul y Blanca-PCR y
Alternativa docente-MST). Estas corrientes, más allá de la verborragia “opositora” a la burocracia Celeste, mantienen a rajatabla la
política de “respetar
los organismos”, subordinando eternamente al activismo
y las luchas que salen por la base a las decisiones de los “cuerpos
orgánicos” (plenarios de secretarios generales). Así
lo han demostrado en la Provincia de Buenos Aires durante
todos estos años, oponiéndose férreamente a la
convocatoria de los plenarios provinciales de delegados y
activistas que le dispute a la burocracia. Sin olvidar, a su
vez, que la lista Azul
y Blanca (CCC) fue parte de la conducción del SUTEBA junto a la Celeste de
Baradel mientras se desarrollaban las experiencias de los
SUTEBAs combativos. Además, con una actitud claramente
divisionista en las últimas elecciones de SUTEBA, jugaron a
romper el frente en la seccional La Plata, presentando
listas varias (Azul y Blanca y Alternativa Docente juntos, y
el Colectivo de Trabajadores solos). Y por si fuera poco,
una vez que fue montado el fraude por la burocracia Celeste
y el Ministerio de Trabajo, no movieron un solo dedo para
recuperar la seccional. Y la última muestra de la
capitulación política de la Lila a la burocracia fue la
firma del acta acuerdo en Neuquén (ATEN Capital) que
significó una derrota categórica de la heroica lucha de
los docentes neuquinos que se desarrolló a
principios de este año.
Debemos agregar además que la Azul y Blanca y Alternativa
Docente se pronunciaron públicamente a favor de una lista
con De Gennaro para la CTA, dejando a las claras que no
tienen la más mínima intención de levantar un programa de
independencia del gobierno y
la oposición patronal, antiburocrático y clasista.
Quieren llevar a los docentes a la rastra de la burocracia
de De Gennaro y de la oposición patronal.
Por todo ello, el paso dado por los compañeros de Tribuna
Docente (PO) en la integración de la lista ha sido muy
importante, si bien su ubicación política hasta último
momento no ha sido el armado de una lista clasista, sino la
búsqueda de una alianza con los grupos de la Lila, lo cual
era un grave error político. Esta posición tiene relación
directa con su posición en la CTA, que abre la ventana a un
posible acuerdo con el sector degennarista. Los compañeros
podrían dar otro paso importante y ser parte del armado de
una lista clasista en las elecciones de la CTA.
Por su parte, los compañeros del PTS en su afán
autoproclamatorio cada vez más pronunciado, presentaron
lista solos. La presentación de la Marrón por separado en
las elecciones no sólo divide, sino que además debilita
las posiciones del clasismo en CTERA. La actitud
divisionista de los compañeros no tiene ningún fundamento
político. En las reuniones para el armado de la lista, su
posición fue un frente PO-PTS (no tuvieron el mismo método
que proponen para el armado de la lista en la CTA) que
dejaba afuera a los demás sectores que estábamos porque
salga una lista clasista y unitaria. Una posición sectaria,
que sólo discutía los cargos, dignos de una corriente que
no se guía por las necesidades objetivas de los
trabajadores (una alternativa que dispute a la burocracia
Celeste y a la oposición conciliadora de la Lila), sino por
un instrumentalismo de la política, que flaco favor hace a
los trabajadores en general y a los docentes en particular.
Esto no sorprende de una corriente que le dio olímpicamente
la espalda a las experiencias de los SUTEBAs combativos que
enfrentaron a la burocracia Celeste en la Provincia de
Buenos Aires. Siempre hemos estado a favor de que la presentación de
listas tengan los mínimos requisitos, pero no a cualquier
precio, estas ínfulas autoproclamatorias del PTS lo han
llevado a presentar una lista sin haber militado para
conseguir los avales necesarios y por esa vía quedaron
“regalados” en las manos de la burocracia para que le
deje correr su lista y de esta manera también le dan letra
a nuestro enemigos para que sigan con su campaña de
desprestigio a la izquierda.
Desde la Agrupación Carlos
Fuentealba-Lista Gris impulsada por los docentes del
Nuevo MAS llamamos a todos los que quieran impulsar esta
alternativa clasista en las elecciones de CTERA a sumarse a
la campaña. Una alternativa que logre aglutinar y prepare a
todos los activistas y la base docente que ha venido
luchando en las experiencias de los SUTEBAs combativos, las
huelgas de Neuquén y otras provincias que han desbordado a
la burocracia de la Celeste
y que quieren realmente un sindicato para la lucha,
antiburocrático e independiente del gobierno K, de los
gobiernos provinciales y de todo sector patronal.