“El
eje tiene que ser la independencia de clase”
(…) Hay
una discusión que es por la que hay que empezar, que es cuál
es el eje del programa. El programa general que presentó
Jorge está bien, en el sentido de que refleja bastante las
posiciones comunes que tenemos, pero que es importante que
sea claro cuál es el eje de la lista y coincido con Gustavo
y con otros compañeros que venimos planteándolo:
el
eje tiene que ser la independencia de clase y la
independencia de clase no es sólo de las variantes burocráticas,
sino del gobierno y de la oposición patronal sojera o
campestre.
(…) Hay
en el país y en la CTA dos aspiradoras patronales que
pelean las experiencias de recomposición. Pelea que
atraviesa, por ejemplo, al cuerpo de delegados del Subte.
Entonces, ese perfil, esa independencia de clase de los
sectores patronales en pugna que son concretos, que son el
gobierno de K y la oposición patronal campestre, obedece a
la necesidad de pelear porque los trabajadores no sean furgón
de cola de las variantes patronales. Con eso claramente
delimitado, me parece que ninguno de los presentes podría
tener problemas en
hacer un llamado a todos los sectores que coincidan con ese
eje y con ese programa.
La
amplitud del llamado tiene que ver con el programa y el eje
con el que nos hemos puesto de acuerdo. Y me parece que podríamos
incorporar a muchos sectores que hoy no están y que tendrían
acuerdo con ese eje y programa.
En segundo
lugar, efectivamente, el perfil de la lista no sólo tiene
que ver con la independencia de los sectores patronales y
del gobierno, sino también con esbozar
un polo que nos permita ir construyendo tanto en la CGT como
en la CTA, alrededor de las experiencias de recomposición
del movimiento obrero, un
polo donde empezar a reagrupar a todas las nuevas y viejas
experiencias de enfrentamiento con la patronal y la
burocracia. Y en ese sentido, me parece que FATE y Kraft,
sin duda, hoy, estarían a la cabeza de eso que nosotros
tendríamos que mostrar, que es parte de lo que queremos
hacer, en todas las estructuras de trabajadores del país.
(…) Me
parece que vamos a ganar a los obreros, si somos capaces de respetar
las experiencias que ellos han construido, de respetar las
comisiones internas y los cuerpos de delegados que han
surgido al calor de la recomposición y de ponernos de
acuerdo, atrás de esas experiencias reales de recomposición
del movimiento obrero, incorporando las representaciones de
las agrupaciones políticas.