En mayo de este año fueron las primeras medidas de
fuerza. Una semana de paro. La patronal pidió un compás de
espera y los compañeros accedieron, supuestamente a más
tardar en treinta días estaría firmado el nuevo
agrupamiento técnico para los tres sectores. Pero esto
nunca sucedió. Cansados
de promesas, idas, venidas y pasados no treinta días sino
varios meses, los compañeros decidieron en asamblea retomar
la lucha. A mediados de septiembre se realizó la primera
semana de paro de cuatro horas por turno y en la segunda
semana el paro fue total.
El resultado fue inmediato, Diego Bossio, director
ejecutivo de ANSES, firmó la
resolución del nuevo agrupamiento técnico para la
imprenta, centro de copiado y archivo. Párrafo aparte
merece la Junta
Interna (la Verde, Lista 1 en la CTA), ya que su postura en
las asambleas fue la de darle una tregua a la patronal. Pero
los trabajadores también afiliados a ATE dijeron que había
que redoblar los esfuerzos y no levantar ninguna medida,
esto fue lo que posibilitó doblarle el brazo a la patronal
y que Bossio firmara la resolución. Está última es la
posición que apoyamos e impulsamos los trabajadores estatales del Nuevo MAS en el
Frente Clasista, Lista 5.
La firma de la resolución es una
indudable conquista y producto de la lucha de los
trabajadores contra las intenciones de la patronal de
dilatar y de la Verde de no ir a fondo. Lo que hay que tener
en cuenta es que en la resolución hay un punto que dice que
Recursos Humanos deberá realizar entrevistas para el
re-encuadramiento del personal que esté en condiciones de
ser técnico. Esto quiere decir que si bien se creó el
nuevo agrupamiento, todavía falta que a los compañeros se
los re-encuadre como técnicos. Es decir, todavía no son técnicos.
Y es acá donde
hay que abrir
bien los ojos, ya que en este pase pueden quedar algunas
cosas en el camino, como por ejemplo: en qué grado, con qué
categoría pasan los trabajadores y si pasan todos. De hecho
la junta interna (la Verde) dijo que presentaría un listado
a Recursos Humanos con los trabajadores para el nuevo
agrupamiento, que hasta ahora no se ha visto. Dicho esto
hay que mantener la presión sin descartar nuevas
medidas de fuerza hasta que todos los trabajadores de la
imprenta, centro de copiado y archivo sean re-encasillados
en el agrupamiento técnico en el grado y con la categoría
que les corresponde y así terminar de coronar un triunfo de
todos los trabajadores.