Socialismo o Barbarie, periódico Nº 203, 09/06/11

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La lucha de INVICO sigue de pie

“Llegamos hasta acá por estar en
lucha,  por la unión que tenemos”

Entrevistamos a un compañero tercerizado de INVICO en lucha por el pase a planta permanente y por las demandas salariales de los efectivos.

SoB: ¿Cómo comenzó el conflicto?

Compañero de INVICO: El conflicto comenzó cuando los compañeros que estamos trabajando en negro, veíamos que nuestros sueldos no aumentaban, no nos permitían a acceder a premios, y los aguinaldos y aumentos que había en la Provincia no nos tocaban.

 Hace un año y medio cuando asume la nueva la nueva intervención y el nuevo gobierno, nos quitan $ 500 del sueldo y no nos dieron un premio que nos daban a fin de año, con la excusa que les demos unos meses para ordenar las cuentas. Hicieron una reestructuración total, nos desarmaron.

SoB: ¿Cómo empezaron a  organizarse?

C.: Fue muy orgánico, nos juntamos y hablamos de los problemas que estábamos teniendo y hubo gente que nos costó muchísimo unir.

Para el conflicto de ahora, que hace un mes y medio estamos llevando adelante,  la organización fue toda muy de pasillo. Empezamos a organizar encuentros entre 10 ó 15 compañeros, nos reconocimos la idea y así fue el comienzo de este  movimiento. Lo bueno es que la gente que nos juntamos ya conocíamos quienes  nos traicionaron una vez. Y lentamente,  muy lentamente, después fue convencer a cada oficina, a cada compañero. Yo tuve que hablar a compañeros de mi misma situación. Empezamos a tener de a poco, hace un año y medio, el reconocimiento de ATE de que estamos en negro.

El click fue en un último aumento, que no nos tocaba a nosotros por estar en negro, y entonces nos movilizamos, salimos de abajo naturalmente así como en los cacerolazos. Bajamos y nos pusimos a hablar (en asamblea junto a los de planta), que no podía ser que sigamos así. Ahí estaba Juan Arnedo, y se  le planteó que queríamos salir y salimos. Esto fue un cambio de tres años, y no fue que se dio de un día para el otro.

Y la bronca comenzó a crecer, y creció, creció, y también los compañeros de planta que tenían dudas se empezaron a dar cuenta que había una injusticia. El sueldo nuestro quedó totalmente estancado, no participamos todavía de premios.

SoB: ¿Participaban  de las asambleas?

C.: Yo nunca participé de una asamblea hasta antes de esa primera movilización, porque mis propios compañeros me decían: por qué ibas a participar de una asamblea si cuando vayas a una asamblea vas a escuchar canalladas, de que los factureros (tercerizados) no trabajan, que están para cobrar un sueldo y nada más, están para nada, no tienen  una función.

SoB: ¿Esta división se fue superando?

C.: Los compañeros de planta nos pidieron disculpas en las reuniones, diciendo que se equivocaron, que no veían compañeros, veían alguien  que vivía del Estado de arriba.

SoB: ¿Ahora los tercerizados y los de planta realizan asambleas en conjunto?

C.: En este momento sí, en las asambleas que se convocan llegamos a un nivel de igualdad en que las decisiones que se toman en asamblea, ya que abarcan también al personal en negro. Con los delegados de ATE nosotros vamos juntos,  nuestros pedidos se plegaron a los de ellos. Las posturas se fueron unificando tomando las decisiones en asamblea, y se llegó a tal cambio que ya trabajamos de igual a igual.

El personal de planta permamente toma decisiones del personal tercerizado y los tercerizados toman decisiones del personal de planta. El personal tercerizado dice: “apoyamos eso, nos parece correcto, porque en el futuro sostenemos que vamos a ser personal de planta permanente”. Entonces temas como la recategorización salarial, que  las sumas en negro se pasen  en blanco, es algo que nos compete a futuro. Y en las medidas se ve la unidad, por ejemplo, el quite de colaboración que son las medidas que estamos tomando ahora, son sostenidas por los compañeros, la jefa de departamento a esta altura respeta nuestra postura. Esto para nosotros es otro nivel de reconocimiento que no teníamos al principio.

SoB: ¿Cómo actúa la conducción de ATE?

C.: La conducción de ATE están de agregados culturales, nos dan prensa  por el reclamo, nos prestan el sonido,  pero gente no llevan. Lo que logramos es que nos metan en el discurso, nos dan una salida mediática. Los delegados sí se mueven saliendo a la calle, entonces para nosotros son más importantes los delegados. Y cuando hablo de ATE, para mí son los delegados de INVICO, porque los otros tienen un papel muy alejado de nosotros, la retórica que usan da fuerza pero no más que eso.

SoB: ¿Qué avances, qué logros se fueron logrando?

C.: Uno de los logros fue el diálogo, de pasar por ese interventor autista, que nos hayan abierto la puerta y recibido es muy importante. Ojo, muchos compañeros consideramos  que no solamente con el diálogo vamos a lograr algo. Llegamos hasta acá por estar en lucha,  por la unión que tenemos.

Empezó a haber un pequeño cambio a nivel de los compañeros de trabajo. Hasta que llegó un momento en que los mismos compañeros que hasta dos tres años nos rechazaban, que decían que éramos factureros, que no merecíamos tener un pase a planta, un aguinaldo, o directamente no nos consideraban trabajadores,  nos comenzaron a decir compañero.

SoB:  El unificar el discurso,  sentirnos y tener un compañero a lado para mi es lo más grande.

C.: Hay una tendencia del gobierno provincial, de achicar programas de ayuda mutua, de tercerizar a las empresas  y que nosotros trabajemos como un empresa contratista que planifica y le da trabajo a las otras empresas y no es casualidad que el gobierno esté alineado con la cámara de la construcción. No solamente los que están en negro sino también los que están en blanco. La idea era sentirnos hacernos sobrar, achicar INVICO a la mínima expresión, y que deje de funcionar.

SoB: ¿Cuáles son sus reclamos?

C.: Lo otro que pedíamos es que los trabajadores en negro pasen a planta permanente  directamente, primero pensábamos que éramos 100, después que hicimos el padrón éramos 190.